El número de víctimas mortales por los incendios que arrasan Los Ángeles, en el oeste de Estados Unidos, aumentó a 24, según informó este domingo el Departamento Forense del Condado de Los Ángeles. Ocho fallecimientos fueron registrados en la zona del incendio de Palisades y 16 en el área del incendio de Eaton.
Mientras los bomberos luchan incansablemente por contener las llamas, las autoridades han advertido que los fuertes y peligrosos vientos podrían extender los incendios hacia áreas residenciales, incrementando el riesgo para la población.
Deanne Criswell, directora de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA), destacó la gravedad de la situación en una entrevista con CNN, advirtiendo que “esto sigue siendo peligroso”. Los incendios han devastado comunidades enteras, dejando tras de sí un panorama de ruinas y poniendo a prueba los recursos y el temple de los equipos de emergencia.
