El Tribunal Supremo de Estados Unidos dio hoy una victoria al presidente, Donald Trump, al respaldar su veto a los militares transgénero, una polémica medida que no había llegado a entrar en vigor por el bloqueo de los tribunales.
La decisión del Tribunal Supremo (5-4) significa que la solicitud de la Administración Trump para permitir que el veto del servicio militar a las personas transgénero entre en efecto.
El Tribunal falló así que la propuesta del Departamento de Defensa estadounidense puede entrar en vigor próximamente, mientras se resuelve el caso en cortes inmediatamente inferiores.
Tras la resolución, el Pentágono defendió en un comunicado que su política no es una prohibición para todas las personas transgénero de las Fuerzas Armadas y argumentó que su iniciativa permitirá al Ejército estadounidense “seguir siendo las fuerzas de combate más letales y efectivas del mundo”.
El Departamento de Justicia, por su parte, aplaudió la decisión del Tribunal Supremo y subrayó que el Pentágono “tiene la autoridad de crear e implementar políticas de personal que considera que son necesarias para proteger mejor” a EU.
El Gobierno de Trump decidió llevar su veto al Supremo en noviembre para que se pronunciara sobre esa política y argumentó que el bloqueo judicial forzó al Ejército a mantener una política anterior, a pesar de que un informe elaborado por el Pentágono estableció que la incorporación a filas de personas transgénero “pone en riesgo la letalidad y eficacia militar”.
Hace tres semanas, el Tribunal de Apelaciones del Distrito de Columbia falló que esta prohibición anunciada por el Pentágono en 2017 no debería haber sido bloqueada mientras era impugnada, a pesar de lo cual la medida no pudo entrar en vigor aún por dictámenes similares de otros tribunales.
Sin embargo, tras la decisión del Supremo de este martes, el Ejecutivo de Trump puede legalmente dar inicio a esta controvertida política.
Una conocida organización de veteranos del Ejército estadounidense, llamada Common Defense, criticó hoy el fallo del Supremo y recordó que hay miles de militares “atrapados en el limbo”.
“Esto no es solo un procedimiento legal abstracto antes de la decisión final: hay miles de militares transgénero actualmente atrapados en el limbo”, lamentó en un comunicado el grupo, que calificó la política de Trump como una “purga silenciosa”.
Por su parte, el Centro Nacional para la Igualdad Transgénero señaló que los militares de ese colectivo se encuentran “bajo una grave amenaza” después de la decisión de la máxima corte del país.
Otras voces más conservadoras del país, como Wayne Dupree, de la Coalición Nacional Diversa por Trump, celebraron por todo lo alto el fallo.
“Es difícil de creer que prohibir a las personas con enfermedades mentales graves servir en nuestras Fuerzas Armadas sea un problema para los tribunales y sea digno de un titular. (…) Gracias Dios y gracias Tribunal Supremo”, apuntó Dupree en su página web.
Trump anunció en julio de 2017 que tenía la intención de prohibir a todas las personas transgénero servir en el Ejército, aunque posteriormente la Casa Blanca aconsejó que no se permitiera el alistamiento de personas que pudieran en un futuro querer someterse a una operación de cambio de sexo.
Finalmente, la cartera de Defensa presentó en marzo del año pasado una normativa que establecía que las personas con “un historial de disforia de género (…) quedan descalificadas del servicio militar excepto bajo circunstancias limitadas”, pero no recomendaba la expulsión de miembros de las Fuerzas Armadas que ya se hubieran sometido a una operación de cambio de sexo.
Tampoco esta normativa se pudo implantar puesto que, además de generar el rechazo de numerosos grupos sociales y de parte del estamento militar, fue nuevamente bloqueada por la Justicia por considerar que se trataba de una medida discriminatoria que atentaba contra los derechos constitucionales.
En total se presentaron cuatro demandas contra estas prohibiciones y varios tribunales impidieron entonces que la política entrara en vigor.
Fuente: https://www.informador.mx