
Washington, Estados Unidos.- El Presidente Donald Trump volvió a tensionar la relación bilateral al advertir que impondrá un arancel punitivo de 5 por ciento a las exportaciones mexicanas si el Gobierno de México no entrega 246 millones de metros cúbicos de agua de la cuenca del Río Bravo a productores de Texas antes de que concluya el año.
A través de un mensaje en Truth Social, el mandatario retomó las inconformidades de agricultores y ganaderos texanos, quienes reclaman que México salde una deuda hídrica superior a 986 millones de metros cúbicos, acumulada durante el quinquenio que terminó a finales de octubre.
“Estados Unidos necesita que México libere 200 mil acres-pie de agua antes del 31 de diciembre, y el resto deberá entregarse poco después”, señaló Trump al citar las presiones provenientes de Texas. Agregó que, hasta ahora, las autoridades mexicanas no han dado respuesta, situación que calificó como injusta para los productores estadounidenses que dependen del recurso. “Por eso he autorizado la documentación para imponer un arancel del 5 por ciento a México si no libera el agua de inmediato”.
Desde finales de noviembre, la Administración estadounidense había solicitado a México cubrir el déficit de entrega de agua del Río Bravo, aun cuando reconoció que el Gobierno de la Presidenta Claudia Sheinbaum incrementó las aportaciones durante el último año.
“México sigue violando nuestro Tratado de Aguas, y esta violación está afectando gravemente nuestros cultivos y ganado en Texas. México aún debe a EU más de 800 mil acres-pie de agua, equivalente a 986 millones de metros cúbicos, por incumplimientos en los últimos cinco años”, declaró Trump. También advirtió que cada retraso profundiza los daños al sector agrícola estadounidense y reiteró que México tiene la obligación de resolver el tema sin demoras.
Actualmente, continúa vigente un arancel del 25 por ciento a los productos mexicanos que ingresan fuera del régimen del T-MEC, impuesto por el Gobierno de Trump debido al papel de México en el tráfico de fentanilo. A ello se suman gravámenes adicionales aplicados a bienes como acero, aluminio, cobre y automóviles.










