La relación entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el empresario Elon Musk se ha deteriorado públicamente tras un intercambio de críticas relacionado con la nueva ley fiscal republicana.
El presidente Trump expresó su decepción con Musk, acusándolo de cambiar de postura por interés propio al criticar el proyecto de ley que elimina créditos fiscales para vehículos eléctricos. “Estoy muy decepcionado con Elon. Lo he ayudado mucho”, declaró Trump durante una reunión en el Despacho Oval con el canciller alemán Friedrich Merz.
Por su parte, Musk respondió en la red social X, negando haber conocido los detalles del proyecto antes de su aprobación y calificándolo de “abominación repugnante” que aumentará el déficit presupuestario en 2.4 billones de dólares en la próxima década.
La ley fiscal, conocida como “One Big Beautiful Bill”, busca extender recortes fiscales, aumentar el gasto en defensa y establecer requisitos laborales para programas de asistencia federal. Sin embargo, ha sido objeto de críticas por su impacto en el déficit y la eliminación de incentivos para energías limpias.
Musk, quien anteriormente lideró el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) bajo la administración Trump, anunció su salida del gobierno tras expresar su desacuerdo con la dirección de la política fiscal.
La ruptura entre Trump y Musk marca el fin de una alianza que influyó significativamente en la política económica y tecnológica de Estados Unidos en los últimos años.
