
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, llegó a Washington para sostener una importante reunión en la Casa Blanca con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Lo acompaña un grupo destacado de líderes europeos, entre ellos la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen; el secretario general de la OTAN, Mark Rutte; el presidente francés, Emmanuel Macron; el canciller alemán, Friedrich Merz; el primer ministro británico, Keir Starmer; y otros mandatarios de Italia, Finlandia y Suecia, en una muestra de unidad y respaldo al pueblo ucraniano.
La presencia de estos líderes busca fortalecer la posición de Zelensky ante posibles presiones de Trump, quien insiste en negociar un acuerdo de paz con Rusia. En sus redes sociales, el presidente estadounidense ha enfatizado que corresponde a Ucrania aceptar concesiones territoriales y excluir la integración a la OTAN, lo que genera inquietud entre Kiev y sus aliados, que temen que se repitan situaciones como la entrega de Crimea en el pasado.
La agenda de la reunión contempla garantizar apoyo de Occidente a Ucrania, tanto en temas de seguridad como de reconstrucción, así como impedir que la paz implique la pérdida de territorios por parte de los ucranianos. Los mandatarios europeos han advertido que cualquier arreglo debe respetar la integridad territorial y la soberanía de Ucrania, mientras que la Unión Europea y la OTAN han expresado su disposición de ofrecer garantías de protección similares a las contempladas en el Artículo 5.
Este encuentro, uno de los más relevantes desde la invasión rusa en 2022, es visto como una oportunidad para blindar a Ucrania frente a presiones para ceder tierras a Rusia y asegurar un futuro más seguro para el país y toda Europa. Zelensky reiteró la urgencia de alcanzar una paz duradera sin sacrificios territoriales, respaldado por sus aliados internacionales y con la esperanza de que las conversaciones marquen un antes y un después en el conflicto armado.










