La Fundación de Cáncer de Mama (Fucam) no va a desaparecer, afirmó el director médico Carlos Alberto Domínguez Reyes, pero no podrá dar atención gratuita por falta de recursos; a pesar de ello, confía en alcanzar un acuerdo con la 4T para no afectar a las cerca de 8 mil 300 mujeres que atienden en distintas fases de tratamiento.
En entrevista con EL UNIVERSAL, el especialista en oncología detalló que en la actualidad tienen a 300 mujeres pendientes de radioterapia, 100 intervenciones quirúrgicas detenidas y 200 pacientes que necesitan medicamentos de alto costo, como trastuzumab; todas ellas serán referidas a centros médicos como el Instituto Nacional de Cancerología y los hospitales General y Juárez de México.
“Me he comunicado con estos hospitales porque considero que son muchas pacientes, incluso las que estaban en seguimiento, les dábamos el medicamento porque muchas no pueden comprarlo, entonces avisé a mis homólogos de la situación, porque irán pacientes en distintas fases de tratamiento, que necesitan radioterapia y quimioterapia”, destacó.
Domínguez Reyes indicó que el acuerdo que mantenía con el Seguro Popular consistía en que la fundación brindaba el tratamiento y el gobierno le pagaba una vez que corroboraba la atención, pero a la fecha no se ha concretado la firma de un nuevo convenio con el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi).
“Vamos a continuar trabajando con el gobierno, exponiendo nuestra preocupación, nuestros problemas; [queremos] seguirlos invitando a tratar de hacer equipo; en este momento no hay convenio firmado, pero lo seguiremos buscando. Puedo decir con seguridad que Fucam no desaparece. Ahorita habrá atención sin gratuidad, con cuotas bajas, pero en un futuro muy cercano, ya que contemos con capital, vamos a seguir otorgando gratuidad”, aseguró.
Ayer la fundación dio a conocer que, sin un acuerdo de coordinación con el Insabi, agotó sus recursos para ofrecer atención gratuita “a la población más desprotegida del país”, por lo que aquellas mujeres que estén a la mitad de su tratamiento serán enviadas a otros hospitales y las de primera vez pagarán cuotas de recuperación.
“Nos hemos endeudado para conseguir tratamientos, principalmente de quimioterapias. Cuando inició el año seguíamos dando los servicios con la esperanza de alcanzar un acuerdo, pero no se pudo y el miércoles aplicamos el último medicamento, no conseguimos más. La gota que derramó el vaso fue que hoy ya no pudimos soportar los tratamientos, por eso me comuniqué con directivos de otros hospitales y hablamos con las pacientes”.
Agregó que el presupuesto que recibían era cambiante debido a la demanda de las pacientes. Mientras que hace un par de años se recibían entre 200 y 400 pacientes anualmente, en 2019 tuvieron a mil 500 mujeres de primera vez con diagnóstico de cáncer que se iban a tratar en Fucam.
“De 2016 a 2020 subió la consulta en 42% de pacientes. Pues, bueno, se podía, lo hacíamos; con la llegada del Insabi pensábamos en una transición, no en la desaparición de los apoyos, tratamos de soportar a las pacientes; incluso, el 13 de enero, a falta de recursos y en espera de lograr un acuerdo, se cobraron cuotas a las pacientes de primera vez y con ese dinero continuar atendiendo a las mujeres que están a la mitad de su tratamiento; hoy ya no se pudo”.
De acuerdo con el director médico, en un año la Fucam atiende 7% de los casos de cáncer de mama detectados en el país, con una plantilla médica de 140 especialistas. En un año otorga 80 mil consultas, realiza 2 mil cirugías, recibe mil 500 pacientes con diagnóstico de primera vez, brinda 9 mil tratamientos de radioterapia, aplica alrededor de 17 mil quimioterapias y a la fecha cuenta con 28 mil expedientes activos.
Las entidades de donde más se reciben mujeres con cáncer de mama son CDMX, Estado de México, Hidalgo, Morelos y Tlaxcala.
Ante la noticia, un grupo de alrededor de 20 pacientes de Fucam bloqueó Calzada de Tlalpan para exigir al gobierno federal que les garantice atención y medicamentos, además de que mantenga los convenios de colaboración con la fundación.
“Queremos vivir”, “AMLO no abandones a las mujeres con cáncer”, “Acuerdo sí, abandono no”, se leía en las pancartas que cargaban las mujeres.
En un video difundido en redes se apreció a otras pacientes gritar: “Queremos Fucam, queremos Seguro Popular”.
Las mujeres pidieron al gobierno que continúe el apoyo del extinto Seguro Popular (ahora Insabi) para que no se corte su tratamiento. Al cierre de esta edición ni la Secretaría de Salud ni el Insabi habían fijado alguna postura sobre el tema.
Fuente: AGENCIAS – EL UNIVERSAL