Ciudad de México, México.- El coordinador parlamentario de Morena en el Senado, Adán Augusto López Hernández, concentra este año el control de mil 894 millones de pesos del presupuesto de la Cámara Alta, recursos cuyo ejercicio se realiza con amplios márgenes de discrecionalidad.
Desde su posición como líder de la bancada mayoritaria y presidente de la Junta de Coordinación Política, el senador tabasqueño define el destino de los gastos administrativos, obras internas, subsidios, viajes oficiales, asignaciones a los grupos parlamentarios y el manejo de los llamados “apoyos” destinados a los 67 senadores morenistas. Además, su fracción tiene el peso decisivo dentro del Comité de Administración, órgano encargado de autorizar prácticamente todas las erogaciones.
En días recientes, López Hernández autorizó una compra masiva de 17 mil ejemplares del libro “Grandeza”, escrito por Andrés Manuel López Obrador. De acuerdo con su propia versión, cada ejemplar se adquirió en 100 pesos, pese a que el precio comercial en librerías es de 448 pesos. Aun bajo esa cifra reducida, el desembolso habría superado 1 millón 700 mil pesos, con el objetivo de distribuirlos entre los integrantes de su bancada.
El presupuesto total del Senado para 2025 asciende a 5 mil 103 millones 817 mil pesos. De ese monto, 3 mil 061 millones 699 mil pesos corresponden al Capítulo 1000, Servicios Personales, que cubre salarios, prestaciones del personal legislativo, dietas de los senadores y beneficios sociales. Se trata del gasto fijo e ineludible.
Sin embargo, el mayor margen de maniobra se encuentra en el Capítulo 3000, Servicios Generales, donde se concentran las partidas más flexibles: recursos para grupos parlamentarios, órganos de gobierno, comisiones legislativas y una amplia gama de gastos administrativos.
Bajo este esquema, la bancada de Morena, integrada por 67 senadores, recibe al menos 300.6 millones de pesos anuales, fondos de los que se desprenden sobresueldos y gastos internos cuya aplicación permanece en la opacidad. El último informe público detallado sobre el uso de estos recursos data de 2022.
En la legislatura anterior, con 57 integrantes, el grupo morenista ejercía 255.7 millones de pesos al año, lo que representaba alrededor de 373 mil pesos mensuales por legislador. Con el incremento en el número de senadores, la responsabilidad administrativa de López Hernández creció hasta manejar, al menos, 25 millones de pesos mensuales, equivalentes a los 300.6 millones anuales actuales.
Estos recursos se encuentran registrados dentro de la partida 3900, “Otros Servicios Generales”, que para 2025 contempla 866.6 millones de pesos. En ese rubro se incluyen tanto las subvenciones a los distintos grupos parlamentarios como otros gastos que no cuentan con una identificación precisa.
El rubro de “Otros Servicios Generales” es considerado el más opaco del Poder Legislativo, debido a la falta de desagregación pública sobre el destino final del dinero. A diferencia de la Cámara de Diputados, donde las subvenciones se etiquetan en el Capítulo 4000, Transferencias, Asignaciones, Subsidios y Otras Ayudas, en el Senado estos recursos se diluyen dentro de Servicios Generales, sin un mecanismo claro de rendición de cuentas.
