Ciudad de México— El Gobierno de Enrique Peña Nieto ha sido muy correcto en su discurso en materia de derechos humanos y en algunas leyes que aprueba, pero no así en los hechos, aseguró Salil Shetty, secretario general de Amnistía Internacional.
En entrevista previa al informe anual que presenta hoy en Washington, Estados Unidos, Shetty señaló la incongruencia en la que cae México al reprochar las políticas migratorias de su vecino país del norte, mientras que en la frontera sur deporta a cientos de centroamericanos que corren riesgo en sus países.
En cuanto a los delitos graves que se cometen en el País, como las desapariciones forzadas, ejecuciones extrajudiciales y torturas, el especialista en política social lamentó que las investigaciones se desarrollen bajo otros tipos penales minimizando la situación que enfrenta México.
“En 2014, me reuní con el presidente Enrique Peña Nieto. Puedo decir que la retórica del Gobierno es muy buena, dijo todo lo que me tenía qué decir en términos de derechos humanos, pero desafortunadamente son cosas que sólo están en el papel”, explicó Shetty vía telefónica.
A diferencia de otros años, mencionó Shetty, el informe mundial de Amnistía Internacional de 2017 fue presentado en Estados Unidos debido a que su presidente Donald Trump fue uno de los personajes que más abonaron al discurso de odio.
“Si bien es cierto que Estados Unidos no tiene el mismo poder de hace 10 años, las acciones de su Gobierno siguen teniendo repercusiones a nivel mundial y, dado que México es su vecino, sufre una repercusión directa”, apuntó.
Sin embargo, consideró como esquizofrénica la postura de México en el tema migratorio, pues ha tenido una respuesta muy dura ante las deportaciones de mexicanos y el proyecto del muro fronterizo, pero se niega a recibir a los centroamericanos rechazados por Estados Unidos.
“Si observamos las políticas mexicanas que hay en este tema, nos podemos dar cuenta que son bastante progresistas. Sin embargo, en la práctica, México sigue sin apoyar a todos estos refugiados que vienen principalmente de El Salvador, Honduras y Guatemala”, manifestó.
“Las políticas mexicanas tienen que estar alineadas con el derecho internacional, por ejemplo: cada persona que pide asilo debe ser atendida individualmente, no se pueden tratar de manera colectiva como ocurre con las deportaciones masivas”.
Cuestionado sobre la imagen que se tiene de México en el extranjero, el experto originario de la India aseguró que Amnistía Internacional no se basa en percepciones, sino en hechos, por lo que realizan acusaciones directas basadas firmemente en evidencias y datos duros.
Enseguida reiteró que en México se cometen crímenes de derecho internacional, que más allá de ser violaciones graves a derechos humanos son delitos que no prescriben en el derecho internacional; por lo tanto, deberían ser investigados y castigados, pero no son aceptados.
Por ejemplo, indicó, está el caso del video en el que se observa a un militar ejecutar a un huachicolero en Palmarito, Puebla.
“Lo que vemos es que no se investiga y no hay cargos específicos por esos delitos. En casos de tortura, las acusaciones son por abuso de autoridad, pero no como crímenes de derecho internacional, como lo son”, explicó.
“En el caso Ayotzinapa, el Gobierno procesó a más de 100 personas, pero en ningún caso se le acusa por desaparición forzada, sino por secuestro o crimen organizado.
“México tiene que parar, dejar de tratar de esta manera los delitos y aplicar los cargos específicos a los culpables”, reprochó Shetty.
Fuente: diario.mx