México.- Prevé el director general de la Cámara Nacional de la Industria Farmacéutica (Canifarma),Rafael Gual, que, debido a los diversos aplazamientos en la obtención de productos farmacéuticos por parte de la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS), esto ocasionará que en un plazo no muy lejano haya un desabasto y, por ende, surtimiento oportuno de insumos y medicamentos elementales en las 32 entidades federativas de México.
La administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, mediante el recién puesto en marcha Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), ordenó que las compras de medicamentos, así como el material de curación necesario en las diversas instituciones de salud gubernamentales en el período 2021-2024 se llevaran a cabo a través de la UNOPS. El pasado 4 de diciembre se publicó la Licitación Pública Internacional.
Lo peor de la falta de abastecimiento, señaló Gual, es que la administración federal no tiene una estrategia diseñada que le permita adquirir los medicamentos restantes, por lo que la insuficiencia de estos productos básicos para la salud y bienestar de los mexicanos es inevitable.
En este sentido, el titular de la Canifarma destacó que el problema tiene sus raíces desde noviembre de 2020, puesto que desde aquel entonces se comenzaron a aplazar la firma de contratos, motivo por el cual tanto la Asociación Mexicana de Industrias de Innovación Farmacéutica (AMIIF) como la Asociación de Industrias Innovadoras de Dispositivos Médicos (AMID), previeron que indudablemente México presentaría un déficit de fármacos y productos altamente elementales, puesto que, es imposible que las empresas farmacéuticas fabriquen los medicamentos de un día para otro.
Respecto al decreto dispuesto por el ejecutivo federal en relación a la compra de medicamentos, las industrias farmacéuticas y de dispositivos que tienen sus matrices en México han aseverado que el convenio entre la UNOPS y el Insabi viola los tratados internacionales en materia de salud, al mismo tiempo que genera el desabastecimiento de los mismos.
Rafael Gual señaló que a pesar de que el ISSSTE y el IMSS han ampliado sus contratos con la industria, estos únicamente equivalen al 30% de todas las claves que se necesitan para poder asistir las principales enfermedades que aquejan a los mexicanos.
De acuerdo a lo declarado por la UNOPS, las primeras entregas de productos farmacológicos se estarán realizando a partir del mes de mayo, sin embargo, aún no se ha brindado la garantía, mediante contratos, que esto se lleve a cabo tal y como se ha anunciado. En este tenor, el director de la Canifarma enfatizó la preocupación que tiene la industria farmacéutica mexicana debido a que ni el Insabi ni la UNOPS se han dignado a contestar los cuestionamientos, que constituyen cerca de 2 mil preguntas, que se han realizado desde 2020, limitándose solamente a dar reuniones informativas.
Entre las dudas que más aquejan a los industriales es el desconocimiento de quién será el encargado de la adquirió y la adjudicación; saber cuáles son los principios legales bajo los cuales se deberán adjudicar los contratos; e incluso, la incertidumbre de qué pasará con los medicamentos que la UNOPS no pueda cubrir.
Otro de los males que afecta a la industria farmacéutica en México es que no hay condiciones equitativas para las empresas nacionales y las extranjeras, puesto que mientras que las mexicanas deben esperar hasta 270 días para poder registrar sus productos, las industrias extranjeras tienen este mismo de forma casi “exprés” amparándose en las enmiendas al artículo 1 de la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público (LAASSP).
En este tenor, aunque desde marzo de 2019 hasta noviembre de 2020 se ha transformado el marco regulatorio sanitario en esta materia, con el propósito de hacer más amenos los procesos de registro e importación de insumos y medicamentos, denunciaron que estos mismos no son validos para las empresas nacionales, todo lo cual es un caldo de cultivo para que la falta de estos productos se de en toda la república mexicana, poniendo con ello en riesgo la vida de los ciudadanos que dependen de estos.
Fuente: AGENCIAS