La consultora Integralia ha identificado diez riesgos que impactarán la vida cotidiana de los mexicanos, destacando el regreso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos y la elección de 881 integrantes de los Poderes Judiciales federal y de 15 estados como los más críticos.
El análisis de Integralia señala que el retorno de Trump podría generar incertidumbre económica, disrupciones comerciales, tensiones diplomáticas y una intensificación de la crisis migratoria. Los empresarios mexicanos se verán particularmente afectados por la incertidumbre en las medidas arancelarias y la posible disminución del interés de los inversionistas en el nearshoring. Además, se anticipan deportaciones masivas que podrían causar conflictos sociales y afectar las remesas, así como desvíos de recursos destinados a contener la migración.
En cuanto a la elección del Poder Judicial, Integralia advierte que la democracia y el equilibrio de poderes enfrentarán uno de los mayores impactos en la historia reciente. Se prevé que la mayoría de los candidatos seleccionados estén alineados con la Cuarta Transformación (4T), lo que podría comprometer la independencia judicial y la capacidad técnica necesaria para una impartición de justicia efectiva.
Los riesgos durante este proceso electoral incluyen un filtrado inadecuado de perfiles, financiamiento ilegal de campañas y un caos legal debido a la falta de reglas claras. También se anticipa una baja participación electoral, movilización de votantes por parte de partidos y estructuras clientelares, así como un voto desinformado.
Integralia subraya que la concentración de poder por parte de la 4T podría erosionar los contrapesos y debilitar a la oposición, relegándola a una presencia casi testimonial en el Congreso. Los otros riesgos identificados incluyen la debilitación del T-MEC, incertidumbre en reformas propuestas por Claudia Sheinbaum, y una mala reforma fiscal que podría afectar la recaudación.
Asimismo, se prevé una pausa en proyectos de inversión en sectores clave, un aumento en la violencia interna de grupos del crimen organizado y una degradación en la capacidad de los gobiernos locales para atender las necesidades de la población.