En un giro a la situación, el gobernador de Jalisco, Alfaro Ramírez, ha roto su silencio respecto a la desaparición de cinco jóvenes amigos el 11 de agosto. A través de su cuenta de la red social “X”, Alfaro reveló que se reunió con el Gabinete de Seguridad y el alcalde de Lagos de Moreno para discutir los avances en la búsqueda de los desaparecidos. Los expertos señalan que podría haber una vinculación con grupos delictivos, aunque aún no se ha señalado a ningún grupo en particular.
El mandatario estatal subrayó que la prioridad en este momento es el caso de los jóvenes desaparecidos. Centenares de efectivos de la Fiscalía del Estado de Jalisco y la Secretaría de Seguridad han sido movilizados en los Altos de Jalisco, la región al norte del estado donde se cree que podrían estar.
A pesar de que el caso está bajo la jurisdicción federal debido a su conexión con el crimen organizado, Alfaro ha expresado su voluntad de involucrarse y de mantener una comunicación constante con las familias afectadas. También espera que la Fiscalía General de la República y el gobierno federal tomen medidas similares.
Las investigaciones continúan para entender los detalles detrás de esta situación que el gobernador describe como “ataques irracionales, violentos y directos a la estabilidad de Jalisco”. Se ha instado a la población a confiar en la información oficial y no dejarse llevar por rumores o desinformación.
El caso tomó un giro más oscuro cuando se difundió una fotografía y una grabación en la que aparentemente se ve a los jóvenes golpeados, amordazados e hincados. Aunque no se ha confirmado la muerte de ninguno de ellos, uno de los vehículos en que viajaban fue encontrado calcinado con posibles restos humanos en su interior.
El estado de Jalisco está en alerta debido a estos eventos, y tanto la sociedad como las autoridades esperan respuestas y acciones concretas para resolver este caso que ha conmocionado a la región.