Alejandro Moreno Cárdenas, presidente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), se encuentra en el centro de la controversia a pocos meses de las elecciones federales de 2024. Desde su llegada al liderazgo del partido en agosto de 2019, prometió una reforma interna que priorizara “causas colectivas” sobre “ambiciones personales”. Sin embargo, cinco años después, él y su compañera de fórmula, Carolina Viggiano, encabezan las listas plurinominales al Senado por el PRI, lo que ha suscitado críticas sobre la autenticidad de sus promesas.
Moreno Cárdenas, quien también ha impulsado la reelección dentro del partido, ha sido objeto de acusaciones por parte de Enrique Ochoa Reza, expresidente del PRI, quien lo tildó de “secuestrador” del partido. Este conflicto pone de relieve las tensiones internas y la percepción de que las decisiones dentro del PRI continúan siendo dominadas por una élite desconectada de la militancia.
En su primer discurso como líder del PRI, Moreno enfatizó la importancia de la “militancia”, señalando que las candidaturas debían ser ganadas por el apoyo popular y no por negociaciones en despachos. Sin embargo, su gestión ha estado marcada por la pérdida de 11 gubernaturas y una reducción drástica en el número de legisladores, además de que por primera vez en la historia, el PRI no presentó un candidato propio a la presidencia.
En una reciente conferencia, Moreno Cárdenas se distanció de la administración de Enrique Peña Nieto, afirmando que muchos de los problemas actuales del partido son herencias del pasado. “Yo no fui culpable del ‘Pemexgate’ ni de los escándalos que marcaron el sexenio pasado”, declaró, defendiendo su gestión y el futuro del PRI.
A pesar de las críticas y la presión por parte de antiguos líderes y expriistas, Moreno Cárdenas ha insistido en que su enfoque está en defender la democracia y los derechos de los ciudadanos, y ha llamado a la militancia a unirse en la lucha contra lo que considera un régimen autoritario. Con las elecciones a la vista, el futuro del PRI y su liderazgo se encuentra en un punto de inflexión crucial.
