Ciudad de México, México. — La Asociación Mexicana de Gas LP (Amexgas) anticipó que durante las próximas dos semanas habrá racionamiento en el suministro de gas LP en la Ciudad de México, Puebla, Tlaxcala, Estado de México y Veracruz, debido a retrasos en la entrega del combustible por parte de Pemex.
La presidenta de Amexgas, Rocío Robles, explicó que la situación deriva de cambios logísticos y de los trabajos de mantenimiento que la empresa estatal realiza en su infraestructura, incluidos gasoductos y refinerías, instalaciones que —según dijo— han sufrido años de recortes presupuestales.
“Pemex es nuestro principal proveedor y ha enfrentado retos en su logística e infraestructura; nos han cambiado los puntos de abasto y aún están atendiendo pendientes de mantenimiento que llevan una década acumulándose”, afirmó Robles durante la presentación del Congreso de Gas LP 2025.
La directiva agregó que las fuertes lluvias recientes en Veracruz provocaron deslaves en la zona por donde opera un gasoducto privado, actualmente en reparación. Esto agravó la presión sobre el suministro durante la semana pasada, que calificó como “crítica”.
Aun así, Robles aseguró que no existe un desabasto, sino una distribución limitada que podría prolongarse un par de semanas mientras se regularizan los flujos.
Por su parte, Pemex rechazó que exista racionamiento en las entidades señaladas. En una tarjeta informativa, la empresa afirmó que sus operaciones de transporte, almacenamiento y distribución se desarrollan con normalidad.
Robles recordó que, desde 2012, Pemex mantiene un rezago en sus programas de mantenimiento, fenómeno que se volvió recurrente por restricciones financieras. Sin embargo, consideró que la reciente reforma fiscal para Pemex permitirá destinar mayores recursos para fortalecer una infraestructura “de primer nivel, pero con necesidades urgentes de mantenimiento”.
Actualmente, México cuenta con una capacidad de almacenamiento de entre 1.5 y 3 días, principalmente proporcionada por el sector privado. La presidenta de Amexgas subrayó que lo ideal sería alcanzar 15 días de reserva, tal como lo establecía la política pública de 2018.
“Debemos ir de forma gradual: de 1.5 a 3 días, luego a 5, 7 y 10 días, hasta llegar al estándar recomendado de almacenamiento”, puntualizó.
