El presidente Andrés Manuel López Obrador ha admitido públicamente que en México se produce fentanilo, una droga sintética altamente peligrosa. Durante una entrevista con la cadena estadounidense CBS para el programa 60 Minutos, el Mandatario reconoció el problema, marcando un cambio de postura respecto a declaraciones previas de su administración. López Obrador mencionó que el fentanilo se produce también en Estados Unidos y Canadá, minimizando así la magnitud de la producción nacional. Esta admisión llega en medio de preocupaciones sobre el aumento del tráfico de esta droga hacia Estados Unidos, donde ha causado un número alarmante de muertes por sobredosis.
La entrevista con CBS, conocida por su riguroso periodismo investigativo, también abordó la violencia política en México. La periodista Sharyn Alfonsi cuestionó al Presidente sobre la efectividad de las investigaciones de los numerosos asesinatos políticos en el país. A pesar de las críticas, López Obrador defendió la labor de su gobierno, argumentando que se están realizando investigaciones, aunque admitió que el proceso de impartir justicia enfrenta desafíos significativos.
Estas revelaciones se dan en un contexto donde organizaciones tanto nacionales como internacionales continúan señalando los desafíos que enfrenta México en materia de seguridad y justicia. La admisión del presidente López Obrador sobre la producción de fentanilo en el país plantea nuevos interrogantes sobre las políticas y estrategias necesarias para abordar el narcotráfico y la violencia en México.