En su conferencia matutina de Palacio Nacional, el presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó la autorización para que 11 oficiales militares de Estados Unidos ingresen a México con el propósito de brindar adiestramiento al Ejército Mexicano. A pesar de la solicitud al Senado, el mandatario subrayó que no se trata de una violación a la soberanía nacional, sino de un acuerdo periódico entre los Ejércitos de México y Estados Unidos.
López Obrador explicó que estos oficiales estadounidenses llevan a cabo labores de adiestramiento anualmente, como parte de un intercambio entre ambos países. Enfatizó que no son tropas, sino oficiales que participan en actividades programadas bajo el acuerdo bilateral.
El presidente destacó el cambio en la dinámica de colaboración entre ambas naciones, señalando que ahora se solicita permiso al Senado, a diferencia de épocas pasadas cuando las tropas estadounidenses ingresaban sin previa autorización.
La solicitud al Senado, realizada a finales de noviembre, detalla que el adiestramiento de los militares de EE.UU. se llevará a cabo entre el 23 de enero y el 21 de marzo de 2024. La actividad, denominada ‘Fortalecer las Capacidades de las Fuerzas Especiales de la Secretaría de la Defensa Nacional’, se desarrollará en el Centro de Adiestramiento de Fuerzas Especiales en Temamatla y en el Centro de Adiestramiento Regional de la I Región Militar en San Miguel de los Jagüeyes, ambos ubicados en el Estado de México.
El comunicado del Senado destaca que el propósito del ejercicio es fomentar la cooperación con las Fuerzas Armadas de Estados Unidos, a pesar de la posición previa del presidente mexicano en contra del ingreso de tropas estadounidenses en territorio mexicano.
