El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, celebró su último Día del Trabajo con un discurso en el Palacio Nacional, donde reafirmó la importancia de la agenda laboral en su administración y destacó los logros alcanzados durante su mandato. Frente a representantes sindicales, López Obrador resaltó políticas como el aumento del salario mínimo, la implementación de un nuevo sistema de pensiones y la extensión de las vacaciones, aunque reconoció que aún quedan pendientes, como la reducción de la jornada laboral.
En su discurso, el mandatario subrayó la resistencia enfrentada ante estas políticas por parte de grupos conservadores, pero afirmó que seguirá trabajando en favor de las mayorías y la transformación del país. Destacó la reciente creación del Fondo de Pensiones para el Bienestar, un nuevo modelo de jubilaciones que busca beneficiar a los trabajadores mexicanos. López Obrador enfatizó la necesidad de dotar de recursos a este fondo, que contará con financiamiento proveniente de diversas fuentes, incluidas cuentas inactivas de afores y recursos decomisados.
El secretario del Trabajo y Previsión Social, Marath Bolaños, respaldó el mensaje presidencial, destacando los avances realizados desde 2019 en el mundo laboral mexicano. Mencionó el incremento del salario mínimo, la regulación de la subcontratación y la firma de instrumentos internacionales como el T-MEC, que han fortalecido el sistema de justicia laboral y beneficiado a millones de trabajadores.
El senador y líder sindical Napoleón Gómez Urrutia elogió las 15 reformas laborales oficializadas durante el gobierno de López Obrador, resaltando su impacto positivo en los derechos de los trabajadores. Por su parte, la secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde, destacó el giro radical en la política laboral durante los últimos años, que ha priorizado la garantía de los derechos sindicales y culminó con la reforma en materia de pensiones.
El evento conmemorativo del Día del Trabajo sirvió como plataforma para resaltar los avances laborales alcanzados y los desafíos que aún persisten en México, marcando el cierre simbólico de una etapa en la administración de López Obrador.
