El presidente de la República, en su conferencia desde Palacio Nacional, arremetió contra las administradoras de las Afores, acusándolas de intentar “distorsionar” la reforma a las pensiones para el Bienestar. Rechazó categóricamente las acusaciones de “expropiación” y afirmó que el objetivo del Fondo de Pensiones para el Bienestar es mejorar las condiciones de jubilación de los mexicanos.
En sus declaraciones, el mandatario desmintió rotundamente las afirmaciones de que el Fondo de Pensiones para el Bienestar constituye un riesgo para los ahorros de los trabajadores. “El Fondo de Presiones para el Bienestar es para que aquel que se jubile reciba más, es absurdo y mentiroso, es una mentira cínica y colectiva”, puntualizó.
El presidente también señaló una supuesta complicidad entre las administradoras de las Afores y los medios de comunicación para promover una “campaña de mentiras”. Utilizó el término “Doctrina Alazraki” para referirse a esta estrategia de desinformación. Según su argumento, estas entidades financieras cuentan con un gran poder económico y se valen de los medios de comunicación para desacreditar la iniciativa de reforma a las pensiones.
La iniciativa del Fondo de Pensiones para el Bienestar, presentada por diputados de Morena, tiene como propósito fundamental garantizar que los ciudadanos puedan recibir el 100% de su salario al jubilarse. Esto se lograría mediante el aprovechamiento de los ahorros no reclamados de las Afores, que serían destinados a financiar el programa. El presidente enfatizó que esta medida busca fortalecer el sistema de pensiones en México y mejorar la calidad de vida de los jubilados.
Esta controversia surge en un momento en que el debate sobre el sistema de pensiones en el país está en pleno auge. La propuesta de reforma ha generado opiniones encontradas entre diferentes sectores políticos y económicos, destacando la importancia de un diálogo abierto y transparente para encontrar soluciones que beneficien a toda la sociedad mexicana.
