En su conferencia matutina de Palacio Nacional, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), declaró desconocer la procedencia de los datos proporcionados por la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA) respecto al número de elementos de los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación (CJNG) que operan en 100 países.
AMLO solicitó a la DEA que proporcione todas las pruebas que respalden sus afirmaciones sobre la presencia de los cárteles en diversos países. Según las declaraciones de la jefa de la DEA, Anne Milgram, durante una comparecencia en la Cámara de Representantes, los cárteles de Sinaloa y CJNG tienen aproximadamente 45 mil miembros operando en más de 100 naciones.
La cifra detallada por Milgram indica que el Cártel de Sinaloa cuenta con unos 26 mil elementos, mientras que el CJNG dispone de aproximadamente 18 mil 800 intermediarios distribuidos en diferentes regiones del mundo.
AMLO dejó en claro que esta información no le fue compartida al Gobierno de México durante su encuentro con funcionarios de seguridad de la Administración Biden, lo que sugiere una falta de coordinación en el intercambio de datos entre ambos países.
El presidente mexicano también expresó su descontento con los medios de comunicación del país, acusándolos de no difundir la reducción de homicidios durante su mandato y, en cambio, dar mayor relevancia a las declaraciones de funcionarios estadounidenses. Asimismo, rechazó las afirmaciones de Milgram sobre la presencia de los cárteles en territorio mexicano, afirmando que no tienen información sobre su actividad basada en resultados de delitos cometidos.
