El presidente Andrés Manuel López Obrador admitió por primera vez la contaminación de un cenote en Quintana Roo debido a la construcción del Tren Maya. Aunque hay evidencia de otros sitios afectados, el mandatario argumentó que se trató de un accidente y que se está trabajando en la remediación.
Durante la conferencia mañanera, López Obrador respondió a preguntas sobre el impacto ambiental del proyecto. Afirmó que el incidente está siendo remediado con la retirada del concreto en el área afectada y que se está trabajando con especialistas para solucionar el problema.
El presidente enfatizó que se trata de un caso aislado y que se están tomando medidas para evitar que situaciones similares ocurran en el futuro. Además, defendió las acciones de su gobierno en materia ambiental, destacando la creación de áreas protegidas y el programa Sembrando Vida.
López Obrador criticó a los “pseudoambientalistas” que cuestionan su gestión, acusándolos de pertenecer al bloque conservador. Argumentó que su gobierno está tomando medidas efectivas para proteger el medio ambiente y que quienes lo critican están motivados por intereses políticos.