El debut político de Andrés Manuel López Beltrán, conocido como “Andy”, al frente de la Secretaría de Organización de Morena, ha sido marcado por reveses electorales significativos. En las recientes elecciones, el partido sufrió derrotas en la capital de Durango y en varias alcaldías de Veracruz, a pesar de los esfuerzos de López Beltrán por impulsar a los candidatos locales.
En Durango, a pesar de múltiples visitas y apoyo directo al candidato José Ramón Enríquez, Morena no logró asegurar la victoria. Estas pérdidas han generado críticas hacia la gestión de López Beltrán, cuestionando su capacidad para liderar estrategias electorales efectivas.
Estas derrotas no solo representan un revés para Morena en regiones clave, sino que también ponen en entredicho la influencia política de la familia presidencial en el partido. Analistas políticos sugieren que estos resultados podrían afectar la percepción pública sobre la dirección y estrategia de Morena de cara a futuras elecciones.
