Trabajadores agrícolas temporales mexicanos comenzarán a recibir vacunas anti COVID-19 en la provincia de Columbia Británica de Canadá, informó hoy la Secretaría de Relaciones Exteriores de México (SRE).
“Como resultado del diálogo y las negociaciones emprendidas entre el Ministerio de Salud, el Ministerio de Agricultura de la Columbia Británica y el Consulado General de México en Vancouver, a partir del día de hoy serán vacunadas en esa provincia de Canadá las personas mexicanas que participan en el Programa de Trabajadores Agrícolas Temporales (PTAT)”, explicó la SRE en un comunicado.
El PTAT tiene como base un acuerdo bilateral entre México y Canadá que garantiza una “migración ordenada, legal y segura”, agregó.
En primera instancia se aplicará la vacuna a los 468 trabajadores mexicanos que se encuentran actualmente cumpliendo la cuarentena obligatoria en hoteles designados por la provincia.
Posteriormente, a través de unidades móviles, se vacunará a las más de mil 700 trabajadores mexicanos que se encuentran ya laborando en diversas granjas, indicó Relaciones Exteriores.
A fin de lograr la vacunación total de las personas trabajadoras mexicanas, se seguirá un “estricto protocolo y procedimiento que será supervisado” por el Consulado General de México en Vancouver.
Para lo anterior, se contará con el apoyo de doctores sobre el terreno y charlas en español sobre la vacuna y el proceso que se seguirá.
Además se deberá tener el consentimiento de los trabajadores para recibir la vacuna y se dará atención a cualquier tipo de reacción secundaria.
“En caso de requerirse una segunda dosis esta será administrada directamente en los centros de trabajo o clínicas cercanas”, indicó la Cancillería.
La Secretaría de Relaciones Exteriores agradeció “el gesto humanitario y la prioridad otorgada por la provincia de Columbia Británica a las y los trabajadores mexicanos considerados como esenciales” para la economía canadiense, concluyó.
Cada año, miles de extranjeros son empleados por las empresas agrarias de Canadá, pero según denuncian activistas y ONG, el modo de contratación abre la vía a la explotación de estos trabajadores.
El año pasado, desde Canadá se denunció un elevado número de infecciones de COVID-19 por parte de jornaleros extranjeros.
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