Con la inconformidad de algunos partidos y consejeros, el INE avaló el uso de 100 urnas electrónicas en la elección de Aguascalientes y Tamaulipas el próximo 5 de junio.
El acuerdo de la Comisión de Seguimiento de los Procesos Electorales Locales establece que se instalarán 50 urnas en cada entidad y nuevamente se usarán los equipos electrónicos de los institutos electorales de Coahuila y Jalisco.
Representantes de partidos, así como la consejera electoral Carla Humphrey, calificaron la prueba piloto, cuyos resultados son vinculantes, como insuficiente pues se había pedido que fueran al menos 150 urnas en dos o tres estados.
Humphrey recordó que Coahuila dispone de 150 equipos y Jalisco de 900, por lo que debió ampliarse el número, pues la normatividad permite hasta un 20 por ciento.
En Aguascalientes, ejemplificó, se instalarán mil 712 casillas, y únicamente el 2.92 por ciento serán urnas electrónicas; y en Tamaulipas representan el 1.04 por ciento de las 4 mil 783 mesas receptoras a instalar.
“¿Cuánto tiempo más vamos a seguir llamando a los ejercicios vinculantes prueba piloto? Considero pobre la realización del ejercicio, pues no se visualiza que el Instituto quiera modernizar o potencializar la forma en la que la ciudadanía puede emitir su voto”, consideró Humphrey.
El representante de Morena, Jaime Castañeda, se pronunció en contra, mientras que la integrante de Movimiento Ciudadano, Nancy Landa, consideró que aunque en un principio algunos los partidos estaban renuentes, ahora hubieran deseado un ejercicio más amplio.
Incluso, la consejera Dania Ravel planteó la necesidad de realizar dicho ejercicio en Oaxaca, pues es una entidad en donde los ciudadanos no han tenido acceso a estos ejercicios, y se debe conocer el comportamiento en estados del sur.
Sin embargo, el presidente de la Comisión, José Roberto Ruiz, aseguró que es el número adecuado conforme a los recursos aprobados.
Por ejemplo, expuso, instalar urnas electrónicas en Oaxaca o Quintana Roo sería costoso, incluso indicó que su manejo en Tamaulipas será “complejo”.
Recomendó que frente a los ataques externos que está teniendo el INE sería bueno demostrar cuánto ha costado instalar una casilla de este tipo en el 2020, 2021.
“Las urnas no están abaratando el costo de las elecciones, el INE tienen que aportar elementos para que si algún día se decide en la legislación, pues sea con las mejores condiciones, para que no se le vuelva a acusar al INE de que las elecciones cuestan mucho.
“Es un número razonable, porque de lo que se trata ahorita es probar un modelo que en muchos sentidos es un giro de 180 grados, no precipitando y condenando al fracaso este tipo de modalidades electrónicas”, añadió.