El Pleno del Senado aprobó por unanimidad la “Ley Silla”, que modifica la Ley Federal del Trabajo para garantizar que los trabajadores que laboran de pie tengan derecho a tomar descansos sentados. Esta reforma busca proteger la salud y el bienestar de quienes permanecen en esta posición durante largas horas, un problema que afecta a un gran porcentaje de la fuerza laboral.
La senadora Geovanna Bañuelos, del Partido del Trabajo, destacó que permanecer de pie por períodos prolongados no solo es agotador, sino que también representa un riesgo significativo para la salud mental y física de los trabajadores. Según datos presentados por Bañuelos, el 45% de los trabajadores realiza su jornada de pie sin descanso, y la mitad de ellos reporta molestias físicas como dolor de espalda y cansancio en las piernas. Además, el 35% trabaja de pie más de ocho horas al día.
La reforma es especialmente relevante para sectores como la industria, el comercio y los servicios, donde se imponen requisitos físicos que pueden ser perjudiciales para los empleados. Por ejemplo, en las tiendas de autoservicio, un 52% de los 896 mil trabajadores son mujeres, quienes enfrentan presiones para mantener una “buena imagen” ante los clientes.
Además de la “Ley Silla”, el Senado también aprobó un dictamen para erradicar la brecha salarial por razones de género, promoviendo acciones que aseguren la igualdad retributiva entre hombres y mujeres. También se modificó la Ley Federal de los Trabajadores al Servicio del Estado para incluir permisos maternos y paternos en caso de adopción, fortaleciendo así los derechos laborales de todos los trabajadores.