Desde las primeras horas de la entrada en vigor de los aranceles del 25% impuestos por el gobierno de Donald Trump, las exportaciones de productos desde Tijuana hacia Estados Unidos han sufrido un impacto inmediato. Así lo alertó Alejandro Jaramillo, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra) en la ciudad fronteriza, quien calificó la situación como una “emergencia” para el sector.
En Tijuana operan alrededor de 1,500 empresas industriales, de las cuales un 80% depende directamente de las exportaciones. La incertidumbre ha llevado a muchas compañías a detener temporalmente sus envíos mientras analizan el impacto de la medida y exploran alternativas para enfrentarlo.
“Existe optimismo de que estos aranceles no duren y que se logre una negociación a corto plazo. Por eso, muchas empresas están optando por frenar sus embarques”, explicó Jaramillo. Sin embargo, advirtió que ninguna industria puede absorber un impuesto del 25% sin afectar su viabilidad financiera.
Ante la crisis, las industrias afiliadas a Canacintra Tijuana sostendrán una reunión para evaluar opciones en materia fiscal y laboral que les permitan sobrellevar esta situación. La preocupación radica en que el sector industrial es el mayor generador de empleo formal en la ciudad, con casi la mitad de las plazas laborales vinculadas a la exportación.
Además, la incertidumbre ha paralizado nuevas inversiones industriales en la región. “Lo grave vendrá en el mediano y largo plazo. Si no se logra una solución negociada, veremos pérdidas de empleo, cierre de empresas y la reubicación de industrias en otros países”, advirtió el líder empresarial.
