Ciudad de México— El Gobierno mexicano insistirá en que los aranceles al acero y aluminio impuestos por Estados Unidos sean eliminados.
La estrategia, sugirió el secretario de Economía Ildefonso Guajardo, es desmontar uno a uno los aranceles a distintos productos para culminar con la eliminación de los impuestos al acero.
“Voy a estar convenciendo a mis contrapartes de que la mejor manera de resolver esto es desactivar las hostilidades. Yo les quito los aranceles sobre quesos, les quito los aranceles sobre puercos y sobre manzanas y ellos me quitan los aranceles sobre el acero”, explicó en entrevista con Reforma.
Al definir la perspectiva luego de consumar el nuevo acuerdo comercial Estados Unidos-México-Canadá (USMCA), Guajardo explicó que en los dos meses que le restan como titular de Economía buscará convencer a sus contrapartes estadounidenses y canadienses.
“Yo adquirí el compromiso con el sector acerero que en los 60 días o 59 días que me quedan de secretario, antes de que el presidente Peña firme el acuerdo (USMCA), vamos a tratar de convencer a nuestras contrapartes en Washington, junto con los canadienses, de negociar una solución.
“Sería un muy mal mensaje llegar a firmar un acuerdo de libre comercio cuando en medio están hostilidades arancelarias”, insistió.
Guajardo puntualizó que el Gobierno mexicano no puede responder en el tema del acero con un arancel espejo pues ello afectaría las cadenas de valor.
“Si yo lo hago espejo y lo impongo a aceros, voy a hacer más costosa mi producción de automóviles, mi producción de enseres domésticos, o sea me doy un balazo en el pie.
“Mejor me voy a productos finales, que puedo abrir la puerta de otros mercados para que no afecten al consumidor y le pego a los intereses, sobre todo de distritos republicanos, que tienen gran influencia en el Congreso”, dijo.
De la otra manera, insistió el funcionario, “el pleito no hubiera tenido presión política, hubiera sido un pleito simplemente sectorial y hubiera afectado mis cadenas de valor”.
Cuestionado sobre la restricción que impuso el nuevo acuerdo sobre negociaciones comerciales con China, Guajardo rechazó que se haya dado un portazo a la potencia asiática.
El apartado 10 del Capítulo 32 del USMCA, establece que en caso de que alguno de los tres socios tenga la intención de realizar cualquier acuerdo comercial con un país que no sea promotor del libre comercio, se dará por terminada la relación trilateral.
Pero Guajardo lo minimizó: “(Eso) es más un statement, una declaración, más que algo que realmente cambie la naturaleza del acuerdo”, dijo.
Fuente: diario.mx