La estampilla Nuestros niños, nuestro futuro, fue cancelada en el Palacio Postal a cargo del gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca y su esposa Mariana Gómez, quien también preside el Sistema DIF estatal, la cual busca promover el primer programa en el país dedicado a proteger y atender a menores de edad que quedaron en situación de orfandad como resultado de la violencia que se vive en la entidad.
Laura Barrera Fortoul, titular del Sistema Nacional del DIF, dijo que el organismo en la entidad entrega más de 6.5 millones de desayunos escolares en 43 municipios todos los días, además de que se ofrece servicio en las 286 estancias infantiles para verificar el desarrollo neurológico para la primera infancia.
A nombre de Angélica Rivera, presidenta del Consejo Ciudadano Consultivo del organismo, reconoció el trabajo realizado con el programa y aseguró que “estas buenas ideas se acompañan de una gran acción solidaria entre todos”.
Afirmó que con Nuestros niños, nuestro futuro, Tamaulipas da el ejemplo y hace un llamado al gabinete y órganos de gobierno para acompañar esta estrategia.
En los 43 municipios del estado, mil niños que perdieron a uno o a sus dos padres serán apoyados con alimento, atención sicológica, útiles escolares y becas desde educación preescolar hasta nivel medio superior. A la fecha, 650 menores de edad han recibido la ayuda estatal y 200 más serán ingresados al programa.
Francisco García Cabeza de Vaca, gobernador de la entidad, aseguró que para restablecer el tejido social en la República es necesario realizar acciones conjuntas entre sociedad y gobierno. “Si no es hoy, cuándo, y si no somos nosotros, quién”.
Expresó que en su primera etapa, Nuestros niños, nuestro futuro brindará atención a mil menores de edad, quienes “recibirán ayuda sicológica, apoyo para que coman y útiles escolares”.
También se pretende mejorar el desarrollo familiar, social y afectivo de los menores de edad, fomentar su deseo de éxito y superación, y se les enseña a manejar emociones para que eviten la sensación de odio y venganza, así como la autovictimización.
En su oportunidad, Mariana Gómez mencionó que el proyecto surgió durante un viaje que realizó con su esposo por todo el estado de Tamaulipas, “fuimos testigos de cómo muchos niños quedaron en condición de orfandad y ninguna institución los había volteado a ver”.
Lamentó que a partir de que México se sumió en la violencia, el sector que representa la semilla del presente y el futuro quedó de lado. “Ellos también son víctimas de esta guerra de los adultos, nuestro programa los quiere alejar del camino equivocado, hoy queremos hacer historia y un llamado de unión entre sociedad y gobierno para garantizar un futuro digno a estos niños”.
Fuente: http://www.eluniversal.com.mx