La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció que la meta de construcción de viviendas durante su sexenio se elevó a 1.8 millones, un aumento significativo respecto a la cifra inicial de 1.2 millones. Este programa está dirigido a personas con ingresos entre uno y dos salarios mínimos.
La mayoría de las viviendas serán construidas y financiadas a través del Infonavit, Fovissste y la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi), con un presupuesto estimado en un billón de pesos. Estas acciones benefician a 3.6 millones de familias mexicanas y están orientadas a ofrecer opciones accesibles con tasas de interés bajas o incluso nulas para no derechohabientes.
El segmento de la vivienda social también prevé la creación de aproximadamente 5.7 millones de empleos directos y 8.5 millones indirectos relacionados con el sector construcción. Además, el mejoramiento y ampliación de viviendas contempla una meta de 1.8 millones de apoyos durante el periodo gubernamental.
Esta estrategia responde a la reducción del rezago habitacional en México, que ha disminuido de más de 9 millones de viviendas en condiciones precarias en 2018 a 8.3 millones en la actualidad. La presidenta puntualizó que se priorizan ubicaciones cercanas a centros de trabajo, con acceso a transporte público y servicios básicos para mejorar la calidad de vida de las familias beneficiadas.
