
En San Luis Potosí, la clausura de una sucursal de Domino’s Pizza provocó gran revuelo entre la población y en redes sociales, luego de que la cadena de pizzerías lanzara una campaña publicitaria en la que hacía referencia al problema de los baches en la ciudad. El anuncio, colocado en una vía principal, ironizaba sobre el mal estado de las calles al señalar que en la capital potosina hay dos cosas seguras: los baches y una pizza en la mesa.
La campaña desató una ola de comentarios entre automovilistas y habitantes, que consideraron ingeniosa la crítica y la tomaron como una denuncia a un problema que afecta diariamente a quienes se trasladan por las principales avenidas y colonias de la ciudad. Sin embargo, en paralelo a la viralización del anuncio, inspectores de la Dirección de Comercio del municipio colocaron sellos de suspensión en la sucursal ubicada en la zona de Villa Magna, al poniente de la capital, bajo el argumento de que el establecimiento no contaba con los permisos necesarios para operar.
Lo que llamó la atención de los ciudadanos es que la sucursal llevaba tiempo funcionando sin haber presentado problemas legales, lo que provocó que muchos consideraran la clausura como una reacción directa del gobierno municipal a la crítica pública que mostró la publicidad de la empresa. En redes sociales, usuarios reaccionaron con molestia hacia el actuar de las autoridades, señalando que lejos de atender la problemática de los baches, optaron por sancionar a quien puso el tema en la agenda pública.
Hasta el momento, Domino’s no ha emitido algún pronunciamiento oficial respecto a la clausura, aunque el caso ha servido para que más personas compartan fotografías y anécdotas sobre el mal estado de las vialidades en diversas zonas de San Luis Potosí. El tema reavivó el debate sobre la necesidad de mejorar la infraestructura urbana, así como el papel que tienen las empresas y los ciudadanos para evidenciar las carencias que impactan en la vida cotidiana de la ciudad










