En la Carretera Palmillas-Portezuelo, a la altura del acceso a la comunidad de Cazadero, en el municipio de San Juan del Río (Querétaro), la policía encontraron este viernes cuatro cuerpos baleados junto a una camioneta de la paraestatal Petróleos Mexicanos (Pemex).
Los occisos identificados como personal de seguridad física de Pemex realizaban un recorrido de vigilancia en los ductos de Pemex, cuando un grupo de sujetos con armas de grueso calibre los rafagueó.
De manera preliminar se dio a conocer que son cuatro las personas que perdieron la vida. Se presume que los agresores huyeron a bordo de vehículos con rumbo al estado de Hidalgo, por lo que se realizó un fuerte despliegue policíaco sobre esa carretera y en la zona de Cazadero.
Al sitio acudieron elementos de la Policía Municipal, Policía estatal, de la Policía de Investigación del Delito (PID), así como de la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano, y se dio parte a la Fiscalía del Estado para las diligencias correspondientes.
Querétaro siempre ha hecho gala de una situación aparentemente alejada de la violencia, y ha enfatizado que, a diferencia de otras entidades azotadas por conflictos entre grupos delictivos, en la región no operan criminales.
Sin embargo, la reciente captura del líder del Cártel de Santa Rosa de Lima, José Antonio Yépez, el Marro, —el pasado 2 de agosto— podría desplazar a Querétaro la violencia que se libra en la entidad colindante de Guanajuato.
Según el analista y asesor en temas de seguridad pública, David Saucedo, el “Marro” tuvo sus orígenes en la vida criminal en el estado de Querétaro, en el narcomenudeo y robo de autos. Aunque es guanajuatense, siempre mantuvo un pie en el estado, amplió sus posibilidades, desarrolló células, pero siempre estuvo en Querétaro.
El Cártel de Santa Rosa de Lima es una confederación de grupos, con una serie de alianzas con bandas delictivas de impacto municipal, que le han permitido tener presencia en la zona centro del país. Tmabién ha influido su establecimiento en el estado de Querétaro, y la alianza con los Viagras en el estado de Michoacán, además de células de Los Rojos del estado de Guerrero que apoyan sus operaciones.
Este viernes, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, señaló que Guanajuato y Querétaro han comenzado a presentar cifras ascendentes en el robo de trenes, luego de que las autoridades mexicanas comenzaran la lucha contra el robo de combustible.
Las propias empresas afectadas y los especialistas en el tema han localizado los puntos clave para este delito.
La región de El Ahorcado, en el estado de Querétaro, es conocido por el robo de trenes y el paso de migrantes. Este lugar se encuentra cerca Celaya, en el municipio de Comonfort (Guanajuato).
Por otro lado se encuentra Empalme Escobedo, otro de los espacios con alta actividad delictiva de este tipo y Apeseo El Alto y El Grande, que formaban parte del dominio de José Antonio Yépez Ortiz.
Fuente: AGENCIAS – INFOBAE