El ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Alberto Pérez Dayán, habría alcanzado un acuerdo con el senador Adán Augusto López y la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, para respaldar la reforma al Poder Judicial. Esta decisión ha generado controversia y especulación sobre la independencia del poder judicial.
Según fuentes del periódico El País, Pérez Dayán se reunió en persona con Claudia Sheinbaum poco antes del 5 de noviembre, fecha en que la Corte debía decidir si la reforma, que propone elegir a jueces, magistrados y ministros por voto popular, continuaba adelante o era rechazada. Durante este encuentro, el ministro adelantó a la presidenta el sentido de su voto y se comprometió a cumplir con su palabra en presencia del senador López.
El día de la votación, Pérez Dayán sorprendió a sus colegas al votar en contra del proyecto del ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá, quien proponía anular la reforma judicial. Esta reforma tiene implicaciones significativas, ya que podría dejar sin trabajo a miles de jueces y magistrados, además de convocar a nuevas elecciones en 2025. Para que el proyecto de González Alcántara prosperara, se requerían ocho votos, pero solo se alcanzaron siete a favor de la propuesta.
Pérez Dayán se alineó con las tres ministras que habitualmente apoyan las iniciativas del partido Morena: Yasmín Esquivel, Lenia Batres y Loretta Ortiz, lo que resultó en la aprobación de la reforma.
El ministro Javier Laynez Potisek expresó su sorpresa ante el voto de Pérez Dayán, destacando que su sufragio era crucial para el resultado. “Nos sorprendió a muchos porque no sabíamos que esa sería su postura”, comentó Laynez.
Ante las críticas surgidas por su decisión, Pérez Dayán defendió su postura, afirmando: “Yo no tendría nada que decir, somos adultos, somos jueces constitucionales y cada quien se hace cargo de sus votos”. Su declaración subraya la tensión entre la independencia judicial y las influencias políticas, un tema que sigue siendo objeto de debate en el país.