Juan Martín Morales Barrera, dirigente del ala disidente Fuerza Oro Negro del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), alertó sobre una elección amañada para la reelección de Ricardo Aldana como secretario general del gremio. Morales solicitó a la Presidenta Claudia Sheinbaum que intervenga para prevenir un posible fraude en el proceso electoral que involucra a aproximadamente 93 mil trabajadores de Pemex.
Morales destacó que Aldana no es un trabajador sindicalizado, lo que lo inhabilita para asumir la dirigencia del STPRM, ya que se encuentra en una posición de confianza y no cuenta con una justificación clara por parte de las autoridades competentes. La convocatoria para la inscripción de planillas fue lanzada recientemente, con la jornada electoral programada para el 28 de octubre y el inicio de campañas el 13 de octubre.
El líder disidente acusó a Aldana de intentar reelegirse de manera deshonesta, utilizando tácticas que recuerdan al viejo estilo priista. “Aldana busca dar un ‘madruguete’ para evitar que se cuestionen sus métodos”, afirmó Morales, quien también es un contendiente por la Secretaría General del sindicato.
Morales criticó la opacidad y corrupción en la cúpula sindical, advirtiendo que la actual dirigencia busca mantener privilegios en lugar de fomentar una renovación genuina del sindicato. “Creemos en la libertad sindical y en el voto libre, secreto y directo de los trabajadores”, enfatizó, pidiendo a Sheinbaum que tome medidas para corregir el rumbo del proceso electoral.
La situación se ha vuelto más tensa tras un enfrentamiento reciente entre sindicalizados y disidentes, que dejó cinco heridos, incluido el líder opositor Rubén Choreño. Este clima de confrontación resalta la urgencia de una supervisión adecuada en el proceso electoral, que se espera se lleve a cabo bajo la nueva administración de Sheinbaum.
El secretario del Trabajo, Marath Bolaños, ha afirmado que las denuncias de irregularidades serán analizadas, pero la incertidumbre persiste sobre el futuro del sindicato petrolero y la legitimidad del proceso electoral que se avecina.
