Unidad de papel
DICEN QUE DICEN que Carlos Arreola Mallol anda jurando que las críticas por su famosa iniciativa —esa que, según cuentan, podía endeudar a medio San Luis— no vienen del pueblo desconfiado, sino de fuego amigo dentro de Morena, donde más de uno le quiere poner piedritas en el camino. Que él no se lo toma personal porque “cuando uno trabaja mucho” se expone a estas cosas, como si la polémica fuera medalla y no foco rojo. Mientras tanto, su coordinador José Roberto García Castillo insiste en que no hay rupturas ni divisiones, que todo es unidad y sonrisas… aunque cada diputado vote por su lado y las versiones se contradigan más que discurso en campaña. Se rumora que en Morena no están divididos: solo están perfectamente desalineados…
Ducto con ruido político
DICEN QUE DICEN que en Escalerillas ya hicieron del agua un pleito, mientras Ricardo Gallardo Cardona insiste en que la polémica no nace del ducto, sino de la grilla que algunos actores metieron para enredar lo que en realidad es una obra que beneficiará primero a la misma comunidad que protesta. El gobernador, con números en mano, recuerda que El Peaje tiene para 14 millones de metros cúbicos —“no se los acaban ni 200 Escalerillas”, dice— y que hoy esa agua ni les sirve del todo por venir escasa y hasta sucia. Con el nuevo ducto, en cambio, tendrán conexión directa, sin andar a cubetazos ni depender de escurrimientos. Pero como siempre, la desinformación hace más ruido que las bombas hidráulicas: los bloqueos, afirma, huelen más a motivación política que a preocupación real. Hoy se dice que a algunos no les conviene aceptar que, mientras otros administran el conflicto, Gallardo sigue enfocado en llevar agua y no en revolverla…
Derecho con tintes guindas
DICEN QUE DICEN que en la Facultad de Derecho de la UASLP la autonomía quedó tan frágil que un soplido partidista la tambalea, y que ahora el nuevo director interino, Jesús Javier Delgado Sam, terminó de encender la pradera al afiliarse a Morena justo cuando anunció que quiere dirigir la escuela. Que la foto con la playera guinda y la manita levantando los cuatro dedos cayó como bomba en un plantel que aún no supera el escándalo por la denuncia de violación mal manejada y los vínculos políticos de los exalumnos involucrados. Y mientras Delgado Sam presume trayectoria en la Judicatura y viejos encargos priistas, también será el árbitro del proceso electoral que definirá quién encabezará la Facultad, mezcla perfecta para que el fantasma del conflicto de interés pase lista. Se dice que en esta Facultad ya no saben si están estudiando Derecho o derecho de partido…
Fuego con nombre y apellido
DICEN QUE DICEN que en Mexquitic alguien anda jugando al pirómano de pueblo, provocando incendios como si el campo fuera fogatero personal, mientras Protección Civil corre de comunidad en comunidad apagando desastres que pudieron terminar en tragedia. Que no es solo quema de basura —práctica vieja y torpe— sino la misma mano incendiando distintos puntos, poniendo en riesgo casas, parcelas y hasta la salud de quienes viven cerca. Y para acabarla, en Villa de Reyes la historia se repite: hectáreas enteras consumidas, humo por todos lados y autoridades trabajando contrarreloj para evitar que el fuego haga lo que algunos irresponsables empezaron. Dicen muchos que en la región ya no se habla de clima seco sino de mentes peligrosamente inflamables…
Encuestas de aire
DICEN QUE DICEN que mientras San Luis Potosí se hunde entre baches, inseguridad y un deterioro urbano que ni la brocha más optimista tapa, Enrique Galindo anda gastando 2 millones 800 mil pesos en encuestas telefónicas automáticas hechas por una empresa de la que nadie sabe nada, como si la transparencia fuera opcional y la realidad municipal dependiera de un call center fantasma. La organización Ciudadanos Observando dice y asegura que la empresa Telencuestas y Servicios S.A. de C.V., creada apenas en 2021, cobra al ayuntamiento de la capital 350 mil pesos al mes sin mostrar metodología, muestra ni rastro de que las llamadas siquiera se hicieran dentro del municipio. Y como no hay resultados públicos ni explicación convincente, crece la sospecha de que más que medir opinión, lo que se busca es medir cómo va la campaña disfrazada de “evaluación ciudadana”. Mucho se comenta que ante la falta de obras visibles, al alcalde Galindo le urge una encuesta que, al menos en papel, le diga lo que la calle hace rato dejó de decirle…
Pozos secos y funcionarios evaporados
DICEN QUE DICEN que en Villa de Pozos el agua se fue desde el 11 de noviembre, pero los recibos siguen llegando puntuales, como si Interapas cobrara por evaporación. El pozo El Palmar tronó, miles de familias llevan días y hasta meses sin una gota, y mientras tanto el director Daniel Hernández Delgadillo anda más perdido que tinaco sin tapa, escondido de los vecinos que ya no saben si reclamarle a él o al alcalde Enrique Galindo, presidente de la Junta de Gobierno del organismo, cuya “supervisión” se siente más simbólica que operativa. Ni pipas, ni plan de emergencia, ni explicación clara: sólo silencio oficial y mucha sed ciudadana. Será que en Interapas tienen talento para repartir culpas, pero no para repartir agua y eso sí que deja seco hasta el ánimo…
PRI en dieta forzada
DICEN QUE DICEN que en el PRI andan tan flacos de presupuesto que la única “reingeniería” posible es seguir recortando gente, aunque Alberto Rojo Zavaleta jure que no hay complot ni drama, solo “adelgazamiento de nómina” para sobrevivir al cierre del año. Que los pagos atrasados, las cinco demandas laborales y la incertidumbre del personal son culpa de la autoridad electoral, mientras en la oficina tricolor hacen cuentas para ver cómo liquidan a los próximos sacrificados… incluido, quizá, el exjefe de comunicación social Miguel Mata, aunque nadie se atreva a confirmarlo. Y mientras la presidenta Sara Rocha habla de cuatro bajas y Rojo dice que “todavía no se materializan”, los trabajadores ya tienen más claro el futuro que el propio partido: cuando el dinero no alcanza, la guillotina administrativa cae sin distinción. El PRI ya no está en reconstrucción sino en reducción.
Juventud prestada
DICEN QUE DICEN que la marcha de la Generación Z nació limpia, auténtica y con la furia juvenil que no pide permiso, pero que detrás del entusiasmo estudiantil ya se asoman las manos de siempre: los mismos panistas y priistas reciclados que ven en cada protesta una plataforma y en cada joven un votante en potencia. Que ahí anda la organización Potosinos con Valor, ese club conservador que presume civismo pero discrimina como comité de admisiones, tratando de reaparecer bajo la sombra de causas juveniles, con José Alberto Meade Mendizábal como maestro de ceremonias, molesto por las reformas que le mueven el tapete al Poder Judicial y al INE. Y junto a él, viejos cuadros como Mario Leal y Marcela Zapata intentando pasar por “aliados” de la chaviza mientras buscan recuperar privilegios perdidos. Algunos siguen sin entender que la juventud protesta por convicción, no para servir de muleta a quienes solo marchan cuando sienten que el poder se les escapa entre los dedos…
Oportunidad perdida
DICEN QUE DICEN que Claudia Sheinbaum no solo enfrentó una protesta, sino el juicio directo de la generación que menos disculpas concede y que más factura pasa. La marcha juvenil terminó entre heridos, detenciones y un Zócalo convertido en ring político, mientras el gobierno respondió con vallas, despliegues y silencios que pesan más que cualquier discurso. Porque el fondo no son los portazos ni las piedras, sino el hartazgo: violencia que no cede, corrupción que no se disfraza y una impunidad que se hereda sexenio tras sexenio. Ahí estaba la oportunidad de oro para abrir diálogo, admitir que el malestar existe y encabezar la salida responsable a una crisis que apenas se asoma. Pero, dicen, la presidenta prefirió blindar la plaza antes que escuchar a quienes hoy la miran con lupa. Y en política, cuando se pierde a la juventud se pierde mucho más que una tarde en el Zócalo…
Porque en San Luis Potosí y en México, siempre habrá alguien que diga que dicen… y casi siempre, tendrá razón.
