En una decisión unánime, la Junta de Coordinación Política (Jucopo) de la Cámara de Diputados acordó modificar el dictamen que busca reducir la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales, sin especificar cuándo será presentado ante el Pleno. El presidente de la Jucopo, Jorge Romero, destacó que este ajuste a la reforma del artículo 123 de la Constitución tiene como objetivo salvaguardar a las micro, pequeñas y medianas empresas.
La propuesta de reforma incluye el establecimiento del derecho de los trabajadores a disfrutar de dos días de descanso a la semana, reduciendo así la jornada laboral a cinco días de ocho horas, totalizando 40 horas semanales. Romero aseguró que la intención es aprobar la reforma antes del 15 de diciembre, pero la incertidumbre persiste respecto a si habrá tiempo para que el Senado y las legislaturas estatales la avalen antes de que finalice el 2023.
Durante el proceso de Parlamento Abierto, diversas opiniones surgieron en torno a la reforma, con el sector empresarial advirtiendo sobre la inoportunidad y el sector obrero mostrando opiniones divididas. La solicitud recurrente en los foros fue la instalación de mesas de trabajo para modificar el dictamen y establecer un periodo de transición en su aplicación.
Jorge Romero informó en conferencia de prensa que se recopilarán todas las opiniones expresadas en los foros, incluyendo las de académicos, especialistas, sindicatos y cámaras patronales. Estas observaciones se enviarán a la Comisión de Puntos Constitucionales, encargada de redactar una nueva versión de la reforma.
El presidente de la Jucopo enfatizó el compromiso de todos los grupos parlamentarios de apoyar a los trabajadores, pero también reconoció la necesidad de cuidar el impacto en las micro, pequeñas y medianas empresas, argumentando que no todas son “macro transnacionales”. Además, admitió que es “prácticamente imposible” que la reforma quede lista en el 2023, pero aseguró que la Cámara de Diputados hará todo lo posible para avanzar en el tema durante este periodo legislativo.