Después de un debate de tres horas, el pleno de la Cámara de Diputados avaló, en lo general, el dictamen de la Miscelánea Fiscal para el 2022 con el apoyo de Morena, Verde y PT.
Este dictamen recibió 260 votos a favor de Morena, Verde y PT; y 218 en contra del PAN, PRI, PRD y MC. Inmediatamente después, el presidente, Sergio Gutiérrez decretó un receso para este martes para continuar a las 10 de la mañana con el desahogo de las 350 reservas o propuestas de modificación que presentó este dictamen.
En este dictamen, que modifica Ley del Impuesto sobre la Renta, de la Ley del Impuesto al Valor Agregado, de la Ley del Impuesto sobre Producción y Servicios, de la Ley Federal del Impuesto sobre Automóviles Nuevos, del Código Fiscal de la Federación y otros ordenamientos, generó el voto en contra de la oposición, es decir, del PAN, PRI, PRD y MC.
Con este dictamen se crea el nuevo Régimen Simplificado de Confianza en el que tributarán todos los pequeños contribuyentes a partir de enero del 2022. Para ello, quedará derogado el Régimen de Incorporación Fiscal (RIF) vigente que surgió con la reforma hacendaria del 2014 en sustitución del esquema conocido como Repecos.
En el nuevo régimen simplificado es para las personas físicas con actividad empresarial, emprendedores y pequeños negocios como estéticas, talleres mecánicos, peluquerías, papelerías, taquerías, entre otros cuyos ingresos no rebasen los 3.5 millones de pesos anuales.
Pagarán una tasa del impuesto sobre la renta (ISR) de entre 1% y el 2.5% dependiendo de sus ingresos sin derecho a deducciones de gastos.
Para los que rebasen el monto de ingresos anuales de 3.5 millones de pesos al año, tributarán en este régimen de confianza, pero pagando la misma tasa del ISR actual de hasta 30%, con otros beneficios.
A partir de enero del 2022, será obligatorio que los jóvenes de 18 años de edad se inscriban al Registro Federal de Contribuyentes (RFC) ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Estarán en el régimen de sujetos no obligados mientras permanezcan fuera del mercado laboral por los que perciban algún ingreso. Es decir que no presentarán declaración anual ni pagarán impuestos. También se topan las donaciones a Organizaciones de la Sociedad Civil y todo lo que rebase el tope pagará impuestos.
Durante el debate de la miscelánea fiscal el coordinador del grupo parlamentario panista, Jorge Romero, subió a la tribuna acompañado de toda su bancada, quienes cargaban pancartas con la leyenda “Sociedad civil: Cuentan con el PAN”.
El legislador denunció que los guindas “no pelaron” ni una sola propuesta de los diputados de oposición, de la sociedad civil, ni de especialistas, “lo único que confirma es que ustedes no saben de democracia, no entienden de razones”.
Sostuvo que la Miscelánea propone terrorismo fiscal al integrar al registro de contribuyentes a jóvenes de 18 años que no son contribuyentes, así como obligar a que los contadores denuncien a sus clientes; “quieren que los contadores sean unos mini ministerios públicos, esa no es su chamba”.
Romero Herrera fue interrumpido por los morenistas quienes comenzaron a gritarle “se les acabaron los moches”. “Es Morena quien quiere Moche”, replicó, coincidiendo con las afirmaciones del diputado de MC, Salvador Caro Cabrera, quien previamente denunció que la Miscelánea Fiscal “solo quiere pasar los contratos de las manos a las que les entregó el pacto por México, a otras manos, las manos de Bartlett y sus futuros cómplices”.
El panista continuó recriminando que las reformas fiscales impedirán a la gente que dona su dinero tener un régimen especial de deducibilidad.
“Lo único que va a provocar es que la gente ya no done su dinero, y esas donaciones son para causas como salud, como enseñanza, como economía, como cultura, como deporte, cosa que ustedes no solo no lo hacen, sino que ahora se los impiden”, reclamó.
Los morenistas volvieron a gritar; “No quieren terminar con las factureras”… “¿A qué factureras se referirán, a las de Bartlett, a las de Epigmenio Ibarra, a las que usa Morena?”, respondió Jorge Romero.
Al término de su participación, el líder albiazul también contestó a Benjamín Robles Montoya, del PT, quien antes aseguró que con la aprobación de la Miscelánea fiscal, “sin duda que se estará consumando la derrota moral y política de la oposición”.
“Dicen que somos oposición moralmente derrotada, pues miren, no hay mayor derrota para quien se dice ser poder legislativo, que convertirse vulgarmente en oficialía de partes del ejecutivo, esa es su máxima derrota moral”, aseveró.
En representación de Morena, apareció una Patricia Armendáriz mediadora, quien pidió un debate “con respeto y sin descalificaciones”. Argumentó que la inscripción de los jóvenes al SAT es “para protegerlos contra los repetitivos y masivos robos de su identidad”, mientras que el tema de las donatarias se impulsa “derivado de los sospechosos donativos de cientos de millones de pesos por parte de personas físicas, que nada tiene que ver con los donativos justamente deducibles para apoyar a la sociedad civil”.
Al término de su ponencia, los panistas corearon a manera de porra “no es tiburón, el borrego de Obrador”, “no es tiburón, el borrego de Obrador”, en alusión a la empresaria quien participa en el famoso programa llamado Shark Tank.
Fuente: https://www.eluniversal.com.mx/