Ciudad de México. — Lo que debía ser una reunión técnica con funcionarios de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) terminó en un escándalo a golpes e insultos entre los diputados Theodoros Kalionchiz, del PAN, y Ricardo Mejía Berdeja, del Partido del Trabajo (PT).
De acuerdo con legisladores presentes, el enfrentamiento ocurrió mientras se discutían los contratos carboníferos adjudicados por la CFE, tema que encendió los ánimos entre los diputados.
La priista Verónica Martínez había advertido que no se puede ser legislador y tener intereses en los temas que se discuten en el Congreso, comentario que desató la furia de Mejía Berdeja, quien salió en defensa de su amigo Antonio “Tony” Flores, alias Lord Lamborghini, diputado local del PT y empresario carbonífero beneficiado con contratos millonarios.
El panista Kalionchiz respaldó la postura de la priista, lo que provocó que Mejía lo insultara llamándolo “braguetero”, en alusión a su matrimonio con una mujer de una familia adinerada de Coahuila.
La discusión escaló hasta llegar a los empujones y golpes, mientras los presentes intentaban separarlos.
“Su asistencia tuvo como único propósito abogar por su amigo coahuilense, el dueño del Lamborghini, dejando claro que su prioridad no es la transparencia ni el interés público”, declaró Kalionchiz tras el altercado.
El panista acusó a Mejía de faltarle al respeto a su madre y a su esposa, y aseguró que el petista ni siquiera forma parte de la Comisión de Energía.
Por su parte, Mejía Berdeja reconoció los empujones, pero justificó su conducta alegando que fue agredido primero.
“Se jactaba de que es un gran empresario; yo le dije que hay gente que es mantenida y ha dado braguetazo, y parece que le dolió mucho”, declaró entre risas.
El coordinador de Morena en la Cámara, Ricardo Monreal, informó que revisará con la CFE si existen condiciones para realizar la comparecencia de la directora Emilia Esther Calleja, programada para el próximo lunes.
“Intentamos evitar roces y confrontaciones físicas”, comentó el senador.
