En un acto histórico, el Gobierno de México, liderado por la presidenta Claudia Sheinbaum, ofreció una disculpa pública por la matanza del 2 de octubre de 1968, un suceso que marcó la historia del país. La disculpa fue presentada por la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, durante la primera conferencia matutina del nuevo sexenio, celebrada en Palacio Nacional.
Rodríguez enfatizó la responsabilidad del Gobierno de la Transformación de reconocer y recordar los crímenes cometidos hace más de cinco décadas. “Como Gobierno de la Transformación tenemos la obligación de garantizar que se reconozcan los crímenes perpetrados hace 56 años”, afirmó.
La funcionaria extendió una sentida disculpa a todas las personas que perdieron a un ser querido y a quienes fueron víctimas de los crímenes de lesa humanidad ocurridos aquella noche. “Hechos como este no pueden volver a repetirse”, concluyó, subrayando la importancia de la memoria histórica y el compromiso del Estado mexicano con la justicia y la verdad.