La Fiscalía General de la República (FGR) ha revelado un aumento alarmante en la cantidad de empleados que no han logrado acreditar los exámenes de control y confianza, diseñados para garantizar la permanencia en sus cargos. La estadística actualizada hasta el 30 de septiembre de 2023 muestra que el porcentaje de empleados que reprobaron estos exámenes se duplicó con respecto al año anterior, pasando del 3.8% en 2022 al 7.7% en 2023.
En 2022, de un total de 5,812 exámenes aplicados, 5,289 empleados lograron acreditarlos, mientras que 223, equivalentes al 3.8%, no lo hicieron. Sin embargo, en el periodo del 1 de enero al 30 de septiembre de 2023, de un total de 3,301 exámenes aplicados, solo 3,046 empleados lograron acreditarlos, y 255, lo que equivale al 7.7%, no pasaron la evaluación.
Estos exámenes de control y confianza, aplicados por el Centro de Evaluación y Control de Confianza, incluyen pruebas que evalúan la situación patrimonial y el entorno social de los empleados, además de exámenes médicos, psicométricos, psicológicos, poligráficos y toxicológicos. Los resultados de estas pruebas determinan si un empleado cumple con los requisitos para seguir en su cargo.
A pesar de estos datos alarmantes, el informe de la FGR no detalla qué sucede con aquellos empleados que no acreditan los exámenes. No se sabe si son dados de baja o si continúan trabajando en la institución mientras esperan una resolución administrativa final.
La Fiscalía General de la República también aplica estos exámenes a empleados de otras instituciones a través de acuerdos de colaboración. Según el reporte más reciente del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad, que lleva un control sobre este tipo de exámenes aplicados a personal de instituciones de seguridad pública en todo el país, el promedio nacional de reprobados es del 5%. Sin embargo, en algunas instituciones, como la FGR, el porcentaje de reprobados es significativamente mayor que la media, mientras que en otras es menor.