La economía mexicana habría registrado un crecimiento del 1.1% en los primeros tres meses de 2023, superando las expectativas de los especialistas y alcanzando su tasa más alta en los últimos dos trimestres. Este resultado se debe a los fundamentales del consumo sólidos, la menor presión en la inflación no subyacente y el proceso de relocalización de las empresas (nearshoring), según estimaciones de Banorte.
El sector servicios lideró el dinamismo económico con un aumento del 1.5% en los primeros tres meses del año, la cifra más alta desde el cuarto trimestre de 2020. Por su parte, el PIB industrial se incrementó un 0.7% respecto al cuarto trimestre de 2022, con un aumento en las actividades relacionadas con la exportación y en particular en el sector manufacturero.
Las actividades agrícolas, pecuarias, forestales y pesqueras experimentaron una contracción del 3.2%, después de tres trimestres consecutivos de crecimiento.
En el periodo enero-marzo de 2023, a tasa anual y con cifras originales, la Estimación Oportuna del Producto Interno Bruto mostró un crecimiento del 3.9%. Por actividad económica, los incrementos fueron de 2.4% en las actividades agropecuarias, 2.7% en las industriales y 4.4% en las actividades relacionadas con los servicios.
Los especialistas esperan que la economía mantenga cierto dinamismo en el segundo trimestre del año, pero con un desempeño general más modesto debido a la desaceleración de la economía estadounidense y el apretamiento monetario acumulado global y nacional.