Editorial – El costo humano de la violencia en México

El reciente informe ‘MX: La Guerra en Números’, publicado por T-ResearchMX, arroja cifras alarmantes sobre la violencia que persiste en México durante el mandato del presidente Andrés Manuel López Obrador. Desde el inicio de su administración el 1 de diciembre de 2018 hasta el 28 de abril de 2024, se han registrado un total de 185,602 homicidios dolosos en el país, según los datos recabados por la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.

Estas cifras, desgarradoras por sí mismas, se ven agravadas por la tendencia al alza en los registros de homicidios a lo largo de los 65 meses del sexenio de López Obrador. El mes de octubre de 2020 se destaca como el periodo con el mayor número de homicidios dolosos, con 3,347 casos reportados. Por otro lado, marzo de 2024 muestra el menor número de eventos, con 2,204 casos registrados. A pesar de ciertas disminuciones interanuales, es innegable la persistencia de la violencia en diversas regiones del país.

Si bien la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana reporta una ligera reducción del 0.4% en los homicidios durante el sexenio de López Obrador, la comparativa con administraciones pasadas pone en perspectiva la gravedad de la situación. Con 185,602 incidentes durante este periodo, el actual Gobierno supera en registros de homicidios dolosos a los gobiernos anteriores de Enrique Peña Nieto, Felipe Calderón y Vicente Fox.

Lee:  Sheinbaum desestima críticas canadienses sobre el T-MEC

Ante estos datos desoladores, es crucial reflexionar sobre las causas y consecuencias de la violencia en México. Más allá de las políticas de seguridad implementadas por el Gobierno, es necesario abordar las raíces estructurales de la violencia, como la desigualdad socioeconómica, la falta de oportunidades y la impunidad. Además, se requiere un enfoque integral que involucre la cooperación entre el Gobierno, la sociedad civil y la comunidad internacional para combatir eficazmente este flagelo.

La seguridad y el bienestar de la población mexicana no pueden seguir siendo comprometidos por la violencia desenfrenada. Es responsabilidad de todos los actores involucrados trabajar en conjunto para construir un país más seguro y justo para todos sus habitantes. En memoria de las víctimas y en solidaridad con sus familias, es momento de redoblar los esfuerzos y trabajar incansablemente hacia un México en paz.

editorial@revistapuntodevista.com.mx

Nota Completa
Back to top button