En México, los retenes son ilegales debido a una serie de razones legales y de derechos humanos. Un retén es un punto de control establecido por las autoridades de seguridad para revisar los vehículos y documentos de las personas que transitan por una determinada área. Sin embargo, en San Luis Potosí, estos puntos de control se han utilizado en ocasiones para cometer abusos y violaciones a los derechos humanos de los ciudadanos.
Una de las principales razones por las cuales los retenes son ilegales es porque violan el derecho a la libre circulación y al tránsito seguro. La Constitución Mexicana garantiza el derecho de los ciudadanos a la libre circulación en el territorio nacional, y los retenes pueden limitar o impedir este derecho sin una justificación legal suficiente.
Además, en muchos casos estos retenes son utilizados para extorsionar a los ciudadanos y para cometer actos de corrupción. Es por demás sabido que las autoridades de seguridad que establecen los retenes exigen sobornos o “mordidas” para permitir que los ciudadanos continúen su camino, lo cual es una práctica a todas luces ilegal y corrupta.
Otra razón por la cual los retenes son ilegales es porque violan el derecho a la privacidad y la protección de datos personales. En algunos casos, las autoridades pueden exigir a los conductores que les entreguen sus documentos personales, como identificaciones, licencias de conducir, y registros de propiedad del vehículo, lo cual puede ser una invasión a la privacidad y una vulneración de los derechos humanos.
En la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos no se establece explícitamente la ilegalidad de los retenes. Sin embargo, existen otros instrumentos legales que pueden ser utilizados para argumentar la ilegalidad de los retenes, como la Ley de Amparo, la Ley de Tránsito y Vialidad, entre otras.
Por ejemplo, los retenes pueden ser considerados como una forma de detención, por lo que si se realizan sin una causa legal o sin respetar los derechos humanos de las personas, podrían violar el artículo 16 de la Constitución que garantiza el derecho a la libertad personal y el debido proceso.
Asimismo, los retenes pueden ser considerados como una restricción a la libre circulación de las personas, lo que podría violar el artículo 11 de la Constitución, que garantiza la libertad de tránsito en el territorio nacional.
Como ciudadanos, tenemos derechos que debemos conocer y que pueden ser útiles en caso de que sentir que nuestros derechos están siendo violados. Algunos argumentos que podríamos utilizar en nuestra defensa son:
Preguntar por qué se nos está deteniendo: Tenemos el derecho a saber por qué se nos está deteniendo y si hay una razón legal para hacerlo. Si las autoridades no pueden darnos una razón válida para detenernos, podríamos preguntar si estamos libres para irnos.
Exigir una orden judicial: Si no hay una razón clara para la detención y nos sentimos en riesgo, podemos preguntar si hay una orden judicial que justifique la detención. Si no hay una orden judicial no podemos ser detenidos o que sea revisado nuestro automóvil ni nuestras pertenencias y podemos solicitar que se nos permita continuar con nuestro camino.
Conocer nuestros derechos: Si creemos que nuestros derechos están siendo violados, podemos recordarle a las autoridades que tenemos derechos constitucionales que deben ser respetados. Esto puede incluir el derecho a permanecer en silencio, a no ser registrado sin una orden judicial, a tener un abogado presente, entre otros.
En resumen, los retenes son ilegales en todo México porque violan varios derechos humanos, incluyendo el derecho a la libre circulación, a la privacidad y a la protección de datos personales. También son utilizados con frecuencia para extorsionar y cometer actos de corrupción. Aunque la Constitución Mexicana no establece explícitamente la ilegalidad de los retenes, existen otros instrumentos legales que pueden ser utilizados para argumentar su ilegalidad y como ciudadanos es importante conocer nuestros derechos y cómo podemos defenderlos en caso de sentir que están siendo violados.