MRS / Revista Punto de Vista / 09 de Enero 2025
La reciente declaración del alcalde Enrique Galindo Ceballos, en la que se deslinda de la deuda de más de 50 millones de pesos que afecta al municipio de Villa de Pozos, plantea serias preocupaciones sobre la responsabilidad política y administrativa en la gestión de las finanzas públicas. Al afirmar que la solución a esta deuda recae únicamente en las instituciones bancarias y el Concejo Municipal de Villa de Pozos, Galindo parece eludir su papel como líder municipal y responsable ante los ciudadanos.
La postura del alcalde, al afirmar que “ya ni está en mi cancha”, no solo es preocupante, sino que también puede interpretarse como un intento de desviar la atención de un problema que afecta directamente a los ciudadanos. La deuda, heredada del proceso de municipalización, no es un asunto menor; implica compromisos financieros que impactan en los servicios públicos y en la calidad de vida de los habitantes. La falta de un plan claro para abordar esta situación revela una desconexión entre la administración municipal y las necesidades reales de la comunidad.
Es cierto que el Concejo Municipal debe establecer un diálogo con el banco para resolver esta deuda. Sin embargo, el alcalde tiene la responsabilidad de facilitar este proceso y no simplemente desentenderse. La colaboración entre los diferentes niveles de gobierno es esencial para encontrar soluciones efectivas a problemas complejos. Al rechazar su papel en este asunto, Galindo corre el riesgo de perpetuar una cultura política donde las autoridades evaden su responsabilidad, lo que podría llevar a una mayor frustración entre los ciudadanos.
Además, el hecho de que los residentes de Villa de Pozos continúen acudiendo a las cajas recaudadoras del municipio capitalino para realizar pagos del Predial, solo para ser rechazados, refleja una falta de comunicación y claridad por parte de las autoridades. La afirmación del alcalde sobre la necesidad de concientización por parte del municipio afectado es válida, pero también indica una falta de coordinación que podría evitarse con una estrategia comunicativa más robusta y efectiva.
La situación actual exige un liderazgo proactivo y responsable por parte del alcalde Enrique Galindo Ceballos. Deslindarse de la deuda no es suficiente; se necesita un compromiso tangible para trabajar junto al Concejo Municipal y las instituciones bancarias en busca de soluciones viables. La transparencia y la colaboración son fundamentales para restaurar la confianza pública y garantizar que los problemas financieros no se conviertan en un obstáculo para el desarrollo y bienestar de Villa de Pozos y sus habitantes.
mrenzi@revistapuntodevista.com.mx
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