Ciudad de México— El proyecto para descentralizar las dependencias del Gobierno federal sería uno de los más caros de la historia de la Administración pública del país, que se contradice al plan de austeridad propuesto por el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, consideró el sector patronal.
En su comentario semanal, Gustavo de Hoyos, presidente de Coparmex, delineó los inconvenientes de esta medida que es uno de los ejes principales del próximo Gobierno.
Según el Proyecto de Nación dado a conocer por el presidente electo, el traslado de las secretarías a otras entidades costaría 125 mil millones de pesos, más 2 mil millones que se piensan invertir en estudios preliminares y otros gastos.
“Hemos dicho con claridad que apoyaremos decididamente las medidas de austeridad republicana que ha postulado el presidente electo y en su gran mayoría son pertinentes. Sin embargo, esta iniciativa de reubicación de las dependencias federales, parece contradictoria a las medidas que se emprenderán para eficientar el gasto público federal y podrían incluso neutralizar ahorros”, afirmó.
El primer inconveniente que encontró Coparmex en contra de la descentralización de las dependencias son los tiempos y costos. Según el organismo, ya que concretar dicha propuesta llevaría más de un sexenio. Otros inconvenientes sería la selección de los inmuebles y la retención de capital humano.
“Exhortamos tanto a la próxima Administración federal como a los nuevos legisladores a que se realicen todos los estudios pertinentes, así como el análisis costo-beneficio, haciendo públicos los resultados”, señaló De Hoyos.
Consideró que por sus dimensiones, la reubicación de las dependencias es un proyecto más trascendente que el del Nuevo Aeropuerto.
Fuente: diario.mx
