Fernández Noroña admite uso de avión privado en gira por Coahuila

El senador morenista reconoció que rentó la aeronave por “necesidad” pese a restricciones legales.

Ciudad de México, México.- Evasivo y sin mostrar pruebas, el senador morenista Gerardo Fernández Noroña reconoció haber rentado un avión privado para realizar su gira por Coahuila, argumentando que fue una medida necesaria para cumplir con su agenda en varias ciudades del estado.

“Es un taxi aéreo”, respondió Noroña ante cuestionamientos de medios sobre el viaje que realizó el pasado fin de semana a bordo de una aeronave Socata TBM850 con matrícula N850KL, registrada en Estados Unidos.

El uso de una aeronave extranjera con fines de transporte dentro del territorio mexicano podría contravenir la Ley de Aviación Civil, cuyo Artículo 17 Bis prohíbe que aeronaves de matrícula extranjera realicen servicios de transporte aéreo remunerado entre puntos del país. Además, el Artículo 18 de la misma norma establece que ese tipo de operaciones sólo puede ser realizado por personas morales mexicanas.

Una fuente especializada en aviación explicó que, sin un permiso especial de la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC), la aeronave no estaría autorizada para operar vuelos rentados en México, lo que podría representar una violación a la normativa vigente.

El legislador justificó el uso del avión al asegurar que su apretada agenda requería desplazamientos rápidos.
“Estuve en Torreón, Francisco I. Madero, Piedras Negras y Acuña en dos días. Por supuesto que requería moverme con mayor rapidez. La compañera Presidenta dijo que cuando es necesario se puede (usar avión privado)”, argumentó.

Al ser cuestionado sobre quién pagó el vuelo, Fernández Noroña respondió en tono de burla: “Salinas Pliego me lo pagó. Está ayudando a los recorridos que hago por el país”, comentó entre risas.

De acuerdo con el seguimiento de vuelo, la aeronave Socata TBM850 N850KL despegó del Aeropuerto Internacional de Toluca, desde donde trasladó al senador a sus llamadas “Asambleas Informativas”.

El caso ha generado críticas, ya que mientras el movimiento de la Cuarta Transformación promueve la austeridad y el uso de transporte público por parte de sus funcionarios, uno de sus principales voceros recurre a un medio de lujo para sus giras políticas.

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