El presidente de la Mesa Directiva del Senado, Gerardo Fernández Noroña, frenó el discurso de legisladores de oposición de los partidos PAN y Movimiento Ciudadano que intentaban abordar el caso de Hernán Bermúdez Requena, exsecretario de Seguridad Pública de Tabasco. Los legisladores querían hablar sobre la orden de captura emitida contra Bermúdez, quien fue nombrado por el actual senador Adán Augusto López.
Fernández Noroña argumentó que el tema no podía ser tratado porque no estaba incluido en la agenda legislativa del día, lo que generó la interrupción de las intervenciones de los diputados Mayuli Martínez (PAN), Pablo Vázquez (MC) y Estefanía Gutiérrez (PAN). Criticó la intención de introducir el asunto “por la puerta de atrás” y aseguró que la mayoría legislativa encabezada por Morena no teme al debate público.
El senador defendió que, aunque se condenan las conductas ilícitas y se exige justicia, en el caso de Adán Augusto López no existe aún una investigación jurídica formal, por lo que no hay razón para retirarlo de su cargo como coordinador o como senador. Indicó también que Hernán Bermúdez tiene la posibilidad de entregarse para enfrentar las acusaciones, señalando que esto solo prolonga la situación.
Esta acción de Fernández Noroña demuestra la defensa firme que Morena hace ante lo que considera una campaña política en contra de su bancada y aliados, enfatizando que no existe pacto de complicidad con funcionarios acusados y que se respetan los procesos legales correspondientes. Mientras tanto, la oposición busca que el tema sea discutido públicamente en el Senado para exigir claridad y rendición de cuentas sobre el caso de Bermúdez.
Este episodio refleja la tensión política en el Senado mexicano respecto a temas de seguridad y posibles irregularidades en algunos funcionarios públicos, poniendo de manifiesto la división entre los partidos y la maniobra legislativa para controlar la agenda desde la presidencia del Senado.
