El gobierno federal ha decretado una nueva expropiación en Quintana Roo para la construcción del Tramo 7 del Tren Maya. Se trata de 119.7 hectáreas de terrenos ejidales en el ejido Juan Sarabia, ubicado en el municipio de Othón P. Blanco. Según el Diario Oficial de la Federación (DOF), el gobierno pagará 136.5 millones de pesos a los campesinos que ya habían acordado la ocupación de los predios.
El proyecto del Tren Maya, que tendrá un recorrido de mil 525 kilómetros, busca impulsar el desarrollo socioeconómico y turismo de la Península de Yucatán. El tramo en cuestión irá de Bacalar a Escárcega, Campeche, y conectará importantes ciudades y sitios turísticos en Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo.
Esta expropiación se suma a otras recientes realizadas por el gobierno federal en el marco del Tren Maya. Apenas el 25 de mayo, se expropiaron 51 inmuebles de propiedad privada en Yucatán y Quintana Roo para obras de infraestructura relacionadas con el proyecto. Además, el presidente Andrés Manuel López Obrador emitió un decreto de expropiación el 22 de mayo para construir los Centros de Transferencia Modal 1, 3, 4 y 6 de la línea 1 del Tren Suburbano en el Estado de México.
El gobierno argumenta que estas expropiaciones son necesarias para garantizar la conectividad y el desarrollo del transporte ferroviario en el país. Estas medidas han generado polémica y críticas, especialmente en relación a los derechos de propiedad y el impacto en las comunidades afectadas.
