El gobierno federal impulsa 15 proyectos hídricos prioritarios en beneficio de millones de habitantes y productores. Germán Martínez Santoyo, director general de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), dio a conocer los detalles en una conferencia de prensa.
Estos proyectos, que cuentan con una inversión de 93,550 millones de pesos, se centran en el desarrollo hidráulico y agrícola del país. El presidente Andrés Manuel López Obrador, a través de la Conagua, ha priorizado el derecho humano al agua y está trabajando en la construcción de presas y acueductos para abastecer de agua potable a diferentes regiones del país, con un caudal estimado de 17 metros cúbicos por segundo.
Además, se están construyendo distritos de riego que permitirán regar más de 100,000 nuevas hectáreas, se está llevando a cabo la recuperación ambiental y se están implementando obras de protección para la población y las áreas productivas.
El director de Conagua enfatizó que estas obras se están llevando a cabo con total transparencia y sin corrupción. El gobierno de México está invirtiendo 93,550 millones de pesos para beneficiar a 21,300,000 habitantes y productores. Además, se han generado más de 44,817 empleos directos gracias a estos proyectos.
Entre los 15 proyectos hídricos prioritarios se encuentran el Plan de Justicia Yaqui en Sonora, la zona de riego presa Picachos y acueducto Picachos-Concordia, así como la presa Santa María en Sinaloa. También se incluyen el Canal Centenario y la zona de riegos en Nayarit, el Parque Ecológico Lago de Texcoco en el Estado de México y la planta potabilizadora Benito Juárez en Tabasco.
Otros proyectos destacados son el programa de Agua Saludable para la Laguna en Coahuila-Durango, el acueducto El Cuchillo II y la presa La Libertad en Nuevo León. Además, se está implementando un plan hídrico en Tula de Allende, Hidalgo, y se están realizando obras de protección para Paso Largo en Veracruz y el acueducto “López Mateos” en Xpujil, Campeche.
Estas iniciativas representan un importante impulso para garantizar el acceso al agua potable, fomentar la producción agrícola y proteger a la población de posibles desastres naturales.