Las inundaciones en calles y avenidas, así como el crecimiento en el nivel de ríos, arroyos, y canalones de desagüe, debido a las intensas lluvias ocasionadas por la depresión tropical “Hanna”, provocaron que varias personas fueran arrastradas por corrientes de agua, pero fueron rescatadas con vida, con excepción de un menor que desde el sábado por la tarde permanece desaparecido tras caer al arroyo Topo Chico, informaron fuentes policiacas y de Protección Civil de Nuevo León.
Este domingo, en la colonia Rincón de la Sierra en Guadalupe, el agua arrastró a una mujer, mientras en la colonia 15 de Septiembre de Monterrey, entre las calles de Fresador y Alfonso Reyes, la corriente se llevó a un hombre que vestía un overol amarillo, para su fortuna fueron salvados por personas que observaron el riesgo que corrían al cruzar de manera imprudente las vialidades convertidas en arroyos.
El sábado, por la tarde, un menor como de diez años cayó al arroyo del Topo Chico que iba crecido por los escurrimientos que dejó una tormenta previa al arribo de “Hanna”, y aunque diversas corporaciones procedieron a su búsqueda hasta el momento no ha sido localizado.
Con la participación de 197 efectivos de la Séptima Zona Militar se puso en operación el Plan DN-IIIE en apoyo a la población civil del área metropolitana y municipios rurales como China, fronterizo con Tamaulipas.
Los militares realizaron entre otras acciones, el retiro de árboles caídos sobre vialidades, remolcaron vehículos varados en zonas inundadas, vigilaron cauces de ríos y arroyos que cruzan la zona metropolitana, y retiraron basura que obstruía las alcantarillas del drenaje pluvial.
Igualmente las corporaciones de Protección Civil del Estado y de los municipios metropolitanos, así como las corporaciones de tránsito con apoyo de fuerzas policiacas estatales y municipales, cerraron pasos a desnivel y avenidas que se inundaron por las fuertes precipitaciones que se presentaron de manera intensa desde las 10:30 de la mañana hasta las dos de la tarde, y tras disminuir y casi cesar por cerca de dos horas, las lluvias arreciaron nuevamente a partir de las 16 horas.
Los escurrimientos provocaron que en San Nicolás de los Garza el arroyo del Topo Chico se llenara a su máxima capacidad, lo que obligó al cierre de las avenidas laterales Jorge Treviño y Cristina Larralde, al tiempo que personal de la Sedena y la Guardia Nacional, cuerpos policiacos y de protección civil, se mantuvieron en alerta por si era necesario evacuar familias que viven en colonias aledañas.
Debido a las inundaciones en calles y avenidas del área metropolitana, el gobierno estatal suspendió a partir de las dos de la tarde, el transporte público de pasajeros y el servicio del Transmetro, por lo que cientos de usuarios que laboran los domingos, se quedaron varados en algunas estaciones del sistema colectivo en San Nicolás de los Garza y Monterrey, ya que muchos taxistas tampoco se aventuran a trabajar en condiciones de riesgo.
Para prevenir tragedias fueron cerrados pasos a desnivel y calles que se inundaron por las intensas precipitaciones, como Manuel Barragán y Fidel Velázquez al norte de Monterrey, así como Eloy Cavazos en Guadalupe.
Asimismo, fueron cerradas la autopista y la carretera libre Monterrey-Reynosa, mientras en el área urbana fueron atendidos decenas de reportes por caída de lonas de anuncios panorámicos, postes y cables de energía eléctrica, ya que el fenómeno meteorológico estuvo acompañado por rachas de viento superiores a los 75 kilómetros por hora.
A las 14: 30 horas, cuando todavía no se registraba lo más intenso de las precipitaciones, Protección Civil del Estado señaló que ya había puntos críticos por el nivel de algunos ríos, arroyos y canalones de desagüe. El arroyo Topo Chico estaba al cien por ciento de su capacidad, mientras los arroyos Cabezada, Seco y San Martín desfogaban al 70 por ciento; Aztlán y El Calabozo iban al 60 por ciento, mientras los ríos La Silla y Santa Catarina, estaban al 40 por ciento de su capacidad.
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