La serie de apagones registrados en tres días consecutivos podría convertirse en una constante en México, advierte Víctor Ramírez, consultor en energía. Con la demanda de energía alcanzando los 47 mil megawatts, y considerando que la marca más alta del año pasado superó esa cifra, Ramírez señala que el país apenas está entrando en una etapa problemática.
En los últimos dos años, las demandas máximas de electricidad se han presentado en junio, lo que indica que la situación actual podría empeorar. Aunque la demanda reciente no fue tan alta, Ramírez estima que este año podría alcanzar los 55 mil megawatts. La caída excepcional en la demanda se atribuye a decisiones gubernamentales que obstaculizaron la producción privada de energía.
El consultor destaca que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador optó por no realizar subastas para comprar energía a productores privados, lo que habría aportado unos 10 mil megawatts a la reserva, más que suficientes para hacer frente a los aumentos en la demanda. Además, la falta de permisos ha dejado paralizados varios parques privados de energía eólica y solar, que podrían haber contribuido significativamente al sistema.
En resumen, la combinación de una demanda eléctrica en aumento y obstáculos a la producción privada de energía podría desencadenar una crisis energética en México si no se toman medidas urgentes.