La Cámara de Diputados aprobó hoy una reforma trascendental que permitirá al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) recibir bienes inmuebles como método de pago para las cuotas obrero-patronales. La medida, respaldada por la mayoría de los legisladores, busca fortalecer el patrimonio del IMSS y mejorar su infraestructura médica.
El dictamen aprobado establece que el IMSS podrá aceptar bienes inmuebles como forma de liquidar adeudos, siempre y cuando estos estén libres de gravámenes, cargas, procesos judiciales o contingencias de cualquier índole. Sin embargo, se excluye la posibilidad de utilizar este mecanismo de pago para cuotas correspondientes al seguro de retiro, cesantía en edad avanzada y vejez.
El documento, ahora remitido al Senado para su revisión y posible aprobación, señala que una vez liquidados los adeudos y descontados los gastos de adjudicación, cualquier saldo a favor del ente público podrá aplicarse a los importes futuros, considerando el porcentaje máximo de adjudicación.
El Consejo Técnico del IMSS será el encargado de establecer los lineamientos para la incorporación de estos inmuebles a la institución, y se destaca que una vez que el inmueble sea transferido, no habrá posibilidad de devolución.
Durante la discusión, la diputada de Morena, Angélica Ivonne Cisneros Luján, argumentó que esta reforma tiene como objetivo proporcionar al IMSS las condiciones legales necesarias para expandir su patrimonio y fortalecer su infraestructura médica.
Cabe destacar que esta medida se enmarca en el contexto de la desaparición del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) en mayo de este año, cuyas funciones fueron transferidas al IMSS-Bienestar. Este programa ahora se encargará de proporcionar servicios y medicamentos a quienes no cuentan con seguridad social. La iniciativa también incluye la transferencia del Fondo de Salud para el Bienestar (Fonsabi) al IMSS-Bienestar, junto con recursos humanos, financieros, materiales, inmuebles, derechos y obligaciones del Insabi. Este proceso se llevará a cabo en un plazo no mayor a 180 días a partir de la entrada en vigor del decreto. Además, el IMSS-Bienestar, en colaboración con la Secretaría de Salud, participará en la adquisición y distribución de medicamentos y otros insumos para la salud.