En México se ha observado un preocupante aumento en los casos de infartos cerebrales en población cada vez más joven. Tradicionalmente, estas enfermedades eran más comunes en personas mayores de 60 años, pero ahora es frecuente que gente alrededor de los 45 años padezca condiciones crónicas como hipertensión o diabetes que pueden conducir a un infarto cerebral. Además del envejecimiento prematuro de enfermedades, factores como el estilo de vida estresante, la falta de sueño adecuado, una alimentación deficiente y la exposición prolongada a dispositivos tecnológicos incrementan el riesgo de sufrir un evento cerebrovascular.
Especialistas también señalan que el aumento en el consumo de sustancias psicoactivas contribuye a este problema, ya que estas drogas pueden causar una contracción repentina de los vasos sanguíneos en el cerebro, favoreciendo el desarrollo de infartos incluso en edades tempranas. En 2024, México registró más de 18 mil muertes derivadas de enfermedades cerebrovasculares, posicionándolas como la séptima causa de muerte en el país.
Cada año se diagnostican alrededor de 170 mil casos de infarto cerebral, y aunque la mayoría de fallecimientos se presentan en personas mayores, los casos en jóvenes han ido en aumento de manera alarmante. Los especialistas insisten en la importancia de la prevención y el diagnóstico oportuno para reducir tanto la mortalidad como las discapacidades asociadas a estos eventos. En este sentido, la Organización Mundial de la Salud ha reconocido la salud cerebral como una prioridad sanitaria mundial, ya que hasta el 90% de los infartos podrían prevenirse con acciones adecuadas y educación pública.
Finalmente, ha sido promovida la estrategia educativa denominada CAMALEÓN, la cual ayuda a identificar rápidamente los síntomas más comunes de un infarto cerebral, tales como la caída de un lado de la cara, debilidad en una mano, dificultad para hablar y la necesidad inmediata de atención médica urgente. Mantenerse informado y adoptar hábitos saludables es crucial para reducir el impacto de esta enfermedad en la población mexicana.
